28/10/2018, 15:48
—Te recuerdo que fui yo la que salvé a Ayame, y te recuerdo que nosotros esposamos a Daruu sin ningún tipo de razón, ¿qué iba a hacer Daruu contra Uchiha Akame y contra mí con Ayame inconsciente? ¡Es su maldita novia, claro que hubiera aceptado nuestra ayuda sí o sí, pero no, teníamos que esposarle!
¡Eri me estaba defendiendo en la cara que Daruu atacase a Akame con la putrefacta justificación de que lo habían esposado!
— ¡Y bien que hicisteis en esposarle! ¡Imaginate qué hubiera hecho si hubiera estado libre! Igual ahora todos los heridos que evitamos en el Estadio los hubiera hecho ese loco en el hospital. No entiendo qué estás haciendo Eri. ¿Por qué estamos discutiendo por esto? ¡Está claro que Daruu se merecía cosas mucho peores que ser esposado! Y aún así se fue andandito de la villa. ¡¿Sabes qué nos hubieran hecho si esto hubiese pasado en Ame?! ¿Recuerdas lo que nos enseñó Datsue? Pues imaginate.
Miraba a Eri asombrado y perturbado a partes iguales. ¿Qué le habían dicho los amenios para que los defendiese? ¿Cómo la habían engañado? Sabía que Eri era demasiado buena, pero nunca me imaginé que fuese capaz de defender el ataque a un compañero de villa. Que me dijese a la cara que ese pedazo de mierda amenia, traidora nauseabunda, no se merecía ser ESPOSADA, COMO SI ESO FUESE A CAUSARLE COSAS PEORES QUE UN APUÑALAMIENTO.
La única palabra que podía atribuirle a Akame era benevolente, porque lo mínimo que le hubiera exigido yo a Daruu por intentar apuñalarme tras salvarle el culo eran sus manos. Y tal vez 10000 ryos en compensación. Pero primero las manos.
¡Eri me estaba defendiendo en la cara que Daruu atacase a Akame con la putrefacta justificación de que lo habían esposado!
— ¡Y bien que hicisteis en esposarle! ¡Imaginate qué hubiera hecho si hubiera estado libre! Igual ahora todos los heridos que evitamos en el Estadio los hubiera hecho ese loco en el hospital. No entiendo qué estás haciendo Eri. ¿Por qué estamos discutiendo por esto? ¡Está claro que Daruu se merecía cosas mucho peores que ser esposado! Y aún así se fue andandito de la villa. ¡¿Sabes qué nos hubieran hecho si esto hubiese pasado en Ame?! ¿Recuerdas lo que nos enseñó Datsue? Pues imaginate.
Miraba a Eri asombrado y perturbado a partes iguales. ¿Qué le habían dicho los amenios para que los defendiese? ¿Cómo la habían engañado? Sabía que Eri era demasiado buena, pero nunca me imaginé que fuese capaz de defender el ataque a un compañero de villa. Que me dijese a la cara que ese pedazo de mierda amenia, traidora nauseabunda, no se merecía ser ESPOSADA, COMO SI ESO FUESE A CAUSARLE COSAS PEORES QUE UN APUÑALAMIENTO.
La única palabra que podía atribuirle a Akame era benevolente, porque lo mínimo que le hubiera exigido yo a Daruu por intentar apuñalarme tras salvarle el culo eran sus manos. Y tal vez 10000 ryos en compensación. Pero primero las manos.
—Nabi—