4/11/2018, 04:29
La suerte no estaba acompañándole. Allí, sumido en la oscuridad de la noche, nada halló que le fuese de utilidad. Ni una entrada oculta, ni huellas sugerentes… Nada. Con la poca luz que había, tampoco era de extrañar.
Estaban los sellos mencionados en las vallas de bambú. Matorrales. El sonido de los grillos canturreando. Pero nada más digno de mención.
Estaban los sellos mencionados en las vallas de bambú. Matorrales. El sonido de los grillos canturreando. Pero nada más digno de mención.