7/12/2018, 01:41
El gyojin se levantó de a poco de la cama a la par de que cogía el agua ofrecida por Muñeca. Se la bebió como buenamente pudo y dejó escapar un evidente respingo de satisfacción al humedecerse los labios. Los tenía sumamente resecos, como si hubiera estado varado en mitad del desierto del País del Viento día y noche.
—¿Tanto? —dijo—. —joder...
Luego, de pronto, Shaneji entró en súbito a la habitación con paso acelerado. Su Hermano de agua lucía bastante contento de que su colega no hubiera muerto durante el duro proceso del Bautizo. Quizás demasiado contento para el poco tiempo que llevaban conociéndose.
Kaido trató de sacárselo de encima y bebió otro sorbo más.
—Llamad a Otohime y a Ryū.
—¿Tanto? —dijo—. —joder...
Luego, de pronto, Shaneji entró en súbito a la habitación con paso acelerado. Su Hermano de agua lucía bastante contento de que su colega no hubiera muerto durante el duro proceso del Bautizo. Quizás demasiado contento para el poco tiempo que llevaban conociéndose.
Kaido trató de sacárselo de encima y bebió otro sorbo más.
—Llamad a Otohime y a Ryū.