Los ninjas también son humanos, demasiado humanos

[Hanamura Kazuma]

La buena guía de juro había devuelto el espíritu de su pupilo hacia el camino de la serenidad, al menos por el momento. Kazuma le agradeció con una medida efusividad y procedió a retirarse, liberando a su sensei de la carga de la enseñanza.

Así transcurrieron tres días de paz, en los que aconteció el encuentro entre los dos jóvenes. Y cuando llego el cuarto día, otra carta llegaría a las manos del marionetista; una mucho más corta y de carácter no tan preocupante como la primera:

De: Hanamura Kazuma
Para: Eikyu Juro

Saludos, sensei. Me es grato informarle que el encuentro con Ooyagi-san se llevó a cabo y resulto sumamente benéfico y satisfactorio.

Como suele ser, no todo salió tan bien como cabe esperar, pues hubo algunas complicaciones curiosas, pero de poca envergadura para alguien que ha contado con su consejo.

Si es posible, seria genial que nos pudiésemos ver el día de mañana para informarle de todo lo acontecido y de los próximos pasos a dar… No es urgente, pero de verdad siento que necesito contarle esto a alguien o mis pensamientos se incendiaran.