En primera vista, es un chico sin nada especial, resaltando únicamente por su gran pereza y ganas de evitar el trabajo pesado y el ligero… y realmente todo esfuerzo físico y mental, siendo feliz en estado un completo estado de reposo, platicando con sus propios pensamientos, los cuales por lo general son los únicos con los que puede mantener una conversación entretenida. Es tan vago que alguna vez se quedó dormido en la academia.
A pesar de su gran pereza, su inteligencia es sobresaliente, al punto de ser ser considerado por su padre un gran futuro para la aldea, puesto que lo que le falta de fuerza lo repone con tácticas y estrategia, aunque para ello tiene que estar por demás motivado… puesto que su falta de interés en el mundo que le rodea le hace preferir hacerse el muerto.
Su interés en las mujeres inexistente, aunque siente cierta atracción por las mujeres de carácter fuerte… puesto que sería la única pareja que en un futuro podría obligarlo a hacer algo… ni digamos trabajar… solo hacer algo… es la clase de chico que no le gusta entusiasmarse. Prefiere no involucrarse en las actividades "problemáticas" o "fastidiosas" para así evitar la responsabilidad. Tampoco le gusta la lucha, por considerar que, como lo hace la mayoría de las cosas, es "problemático. Es bastante callado y solo suele hablar cuando se necesita de su intervención en un asunto de sensatez y prudencia.
Con el tiempo, su desgana, pereza o cansancio de hacer algo han ido disminuyendo, al ser más grande y más maduro empezó a saber que tenia que hacer algo con su vida y su motivación apareció, esta motivación era la de proteger a sus padres, ahora ya más viejos, pero para eso debía realizar trabajos o misiones y así ganar dinero para que su familia pudiera comer, con su padre ya retirado Kyo era la una fuente de ingresos en la casa.