28/01/2019, 23:25
(Última modificación: 28/01/2019, 23:25 por Uzumaki Eri.)
Pensó que podría atravesarlo, pero la maldita armadura que llevaba había sido demasiado hasta para su técnica. Tragó grueso mientras movía su mano hacia atrás, sacándola, mientras veía al jefe levantarse y tomar el hacha, dispuesto a terminar con su vida por haberle desafiado.
—Maldita insensata. ¡Atacad!
Todos los que rodeaban la mesa se levantaban sedientos de sangre, algunos incluso les costó acostumbrarse a estar sobre dos piernas, sin embargo el que más imponía era el que tenía frente a ella, que levantaba la mano que retenía aquel armatoste enorme, dispuesto a acabar con ella.
Movió sus manos, juntándolas, dispuesta a hacer otra técnica hasta que...
Nabi entró en el combate.
El Inuzuka se había tirado contra el jefe con su aspecto más salvaje para atacar sus extremidades, obligándole a dejar caer el hacha por los golpes que estaba recibiendo. El Nabi asalvajado miró a la pelirroja y pareció indicarle algo, sin embargo no tardó en lanzarse contra otro grupo de bandidos, dejando al jefe ligeramente fuera de la batalla. Stuffy se añadió a ellos haciéndose paso entre los bandidos.
Eri estaba rodeada, pero al menos no estaba el bandido jefe entre ellos, o al menos no parecía unirse en un tiempo cercano. Miró a los que tenía cerca, algo confundidos, sin saber si atacar o no, hasta que dos de ellos decidieron acercarse a ella. No perdió el tiempo, sin embargo; y haciendo el sello del carnero con su mano diestra, y luego lo hizo con la izquierda, haciendo así salir dos cadenas justo de las palmas de sus manos para atravesar a los bandidos que se habían querido acercar para atacarla.
—Maldita insensata. ¡Atacad!
Todos los que rodeaban la mesa se levantaban sedientos de sangre, algunos incluso les costó acostumbrarse a estar sobre dos piernas, sin embargo el que más imponía era el que tenía frente a ella, que levantaba la mano que retenía aquel armatoste enorme, dispuesto a acabar con ella.
Movió sus manos, juntándolas, dispuesta a hacer otra técnica hasta que...
Nabi entró en el combate.
El Inuzuka se había tirado contra el jefe con su aspecto más salvaje para atacar sus extremidades, obligándole a dejar caer el hacha por los golpes que estaba recibiendo. El Nabi asalvajado miró a la pelirroja y pareció indicarle algo, sin embargo no tardó en lanzarse contra otro grupo de bandidos, dejando al jefe ligeramente fuera de la batalla. Stuffy se añadió a ellos haciéndose paso entre los bandidos.
Eri estaba rodeada, pero al menos no estaba el bandido jefe entre ellos, o al menos no parecía unirse en un tiempo cercano. Miró a los que tenía cerca, algo confundidos, sin saber si atacar o no, hasta que dos de ellos decidieron acercarse a ella. No perdió el tiempo, sin embargo; y haciendo el sello del carnero con su mano diestra, y luego lo hizo con la izquierda, haciendo así salir dos cadenas justo de las palmas de sus manos para atravesar a los bandidos que se habían querido acercar para atacarla.