13/02/2019, 07:17
Rōga terminó con su barra de granola e hizo algunos comentarios acerca de lo estricta que era tanto la Arashikage como la crianza en Amegakure.
”He ahí otro punto de diferencia… ¿qué tan alejada estará la Arashikage de Sandaime-sama?” pensó la chica, imitando al peliazul y echándose a la boca el resto de su propia barra.
El Amejin se activó de repente, dando algunos saltos y patadas, demostrando así que estaba listo para continuar su camino. Le tendió la mano a la Kusajin, quien le dirigió una mirada algo avergonzada. Asintió y se asió de Rōga para ponerse de pie. Su costado seguía ardiéndole, aunque en menor grado, y pensó que tal vez podría bajar algo del dolor si caminaba lentamente.
—M-me alegra que se sienta mejor ya, Rōga-san. ¡Sí! —Asintió tan fuerte que le dio un punzón de dolor en el costado, pero no le quitó la sonrisa —. ¡Llevaré mi estilo al siguiente nivel! ¡Gra-gracias por un excelente combate! ¡La próxima vez le mostraré la verdadera herencia de mi familia!
Sus manos seguían entrelazadas en un apretón, uno que Ranko no dejó de asir firmemente. Era la primera vez que cruzaba camino con alguien de Amegakure no Sato, y era el primer aliado que encontraba en dicha aldea.
—¿Regresará a su aldea, Rōga-san? Creo que yo seguiré viajando, tal vez un poco hacia el sur… Cre-creo que descansaré.... Descansaré un poco después de seguir. No creo que deba de regresar a Kusagakure todavía…
Esperó a que el peliazul le contestara, aunque tal parecía que no faltaba mucho para ir por caminos separados. Quién sabe cuándo volverían a enfrentarse el Lobo y el Conejo.
”He ahí otro punto de diferencia… ¿qué tan alejada estará la Arashikage de Sandaime-sama?” pensó la chica, imitando al peliazul y echándose a la boca el resto de su propia barra.
El Amejin se activó de repente, dando algunos saltos y patadas, demostrando así que estaba listo para continuar su camino. Le tendió la mano a la Kusajin, quien le dirigió una mirada algo avergonzada. Asintió y se asió de Rōga para ponerse de pie. Su costado seguía ardiéndole, aunque en menor grado, y pensó que tal vez podría bajar algo del dolor si caminaba lentamente.
—M-me alegra que se sienta mejor ya, Rōga-san. ¡Sí! —Asintió tan fuerte que le dio un punzón de dolor en el costado, pero no le quitó la sonrisa —. ¡Llevaré mi estilo al siguiente nivel! ¡Gra-gracias por un excelente combate! ¡La próxima vez le mostraré la verdadera herencia de mi familia!
Sus manos seguían entrelazadas en un apretón, uno que Ranko no dejó de asir firmemente. Era la primera vez que cruzaba camino con alguien de Amegakure no Sato, y era el primer aliado que encontraba en dicha aldea.
—¿Regresará a su aldea, Rōga-san? Creo que yo seguiré viajando, tal vez un poco hacia el sur… Cre-creo que descansaré.... Descansaré un poco después de seguir. No creo que deba de regresar a Kusagakure todavía…
Esperó a que el peliazul le contestara, aunque tal parecía que no faltaba mucho para ir por caminos separados. Quién sabe cuándo volverían a enfrentarse el Lobo y el Conejo.
Pensamientos (Plum) ✧ Diálogos (PaleVioletRed)