14/02/2019, 11:05
Pero Daruu detectó el cambio de humor de Ayame y rodeó sus hombros con su brazo derecho. Con la otra mano, levantó su barbilla.
—Eh, mira qué bonito es esto —susurró—. Vamos, nos merecemos un descanso. Además, ya te dije que te protegería, ¿no? —Sonrió. Le dio a la chica un beso en la mejilla, y echó a correr por la hierba.
El suave calor primaveral bañó su piel. Acostumbrado a un clima más bien adverso, Daruu no solía disfrutar tanto del Sol, pero desde aquél valle, encerrado entre cordilleras, le recordaba a otro que le encantaba: el del Valle de los Dojos. Era muy similar, de hecho, sólo que el espacio alrededor de la capital era más virgen, libre de todos aquellos dojos y hoteles, y la ciudad en sí, muchísimo más grande.
—¡Además! Tengo pensado empezar compartiendo algo muy especial contigo.
—Eh, mira qué bonito es esto —susurró—. Vamos, nos merecemos un descanso. Además, ya te dije que te protegería, ¿no? —Sonrió. Le dio a la chica un beso en la mejilla, y echó a correr por la hierba.
El suave calor primaveral bañó su piel. Acostumbrado a un clima más bien adverso, Daruu no solía disfrutar tanto del Sol, pero desde aquél valle, encerrado entre cordilleras, le recordaba a otro que le encantaba: el del Valle de los Dojos. Era muy similar, de hecho, sólo que el espacio alrededor de la capital era más virgen, libre de todos aquellos dojos y hoteles, y la ciudad en sí, muchísimo más grande.
—¡Además! Tengo pensado empezar compartiendo algo muy especial contigo.
![[Imagen: K02XwLh.png]](https://i.imgur.com/K02XwLh.png)