21/03/2019, 20:02
—¡Un momento, eso no es justo! —protestó, mientras Ayame se daba la vuelta, se separaba de él y se enterraba bajo las sábanas—. ¡Eh, y encima me dejas solo después de...! ¡...de usarme como un objeto! —dramatizó, fingiendo llorar. Al ver que la muchacha no le hacía caso, se subió encima de ella, retiró las sábanas de golpe y la hizo girar para tenerla frente a él—. ¿Ah sí? ¡Te vas a cagar!
Daruu clavó los dedos en sus costados y comenzó a hacerle cosquillas, sin intención de parar.
Daruu clavó los dedos en sus costados y comenzó a hacerle cosquillas, sin intención de parar.