29/03/2019, 17:45
Daruu se detuvo en seco, giró la cabeza y Ayame adivinó la sorpresa en sus ojos. No añadió nada más, esperó que el muchacho se volviera hacia ella.
—No he seguido estudiándolo, pero creo que tengo un nivel bastante avanzado —contestó al fin. Sonrió, y su gesto se transformó en confusión—. ¿Pero y eso qué tiene que ver ahora?
Ayame entrelazó las manos en un sello, el sello del Pájaro, y habló:
—Tú me has enseñado una técnica. —Extrañamente, la voz del muchacho sonó desde la espalda de Daruu—. Es justo que yo haga lo mismo. —Y ahora a su izquierda, junto a su oído.
—No he seguido estudiándolo, pero creo que tengo un nivel bastante avanzado —contestó al fin. Sonrió, y su gesto se transformó en confusión—. ¿Pero y eso qué tiene que ver ahora?
Ayame entrelazó las manos en un sello, el sello del Pájaro, y habló:
—Tú me has enseñado una técnica. —Extrañamente, la voz del muchacho sonó desde la espalda de Daruu—. Es justo que yo haga lo mismo. —Y ahora a su izquierda, junto a su oído.