6/04/2019, 16:29
Juro destacó su largo proceso de aprendizaje como marionetista, que comenzó cuando era niño bajo la instrucción de su hermana mayor. Para él, los hilos eran ya una extensión de sus dedos. Lo demostró cuando, de forma disimulada, fingió que la lata se le caía. Daruu adelantó el brazo para cogerla, pero no fue necesario, porque con un hilo de chakra Juro fue capaz de tirar de ella y devolverla a la mano.
—¡Vaya, increíble! —le sonrió Daruu, fascinado.
El muchacho le confesó que aún estaba tratando de controlar varias a la vez. Daruu opinaba que ya se le daba bastante bien. Lo había pasado mal durante el combate. Estaba a punto de contestarle eso mismo cuando el kusajin deseó dejar de hablar de él y se interesó por la habilidad de Daruu con el Suiton.
—¿Ah, sí? —dijo, hinchado como un pavo, acariciándose el bajo de la nariz con el dedo índice—. El Suiton es la especialidad de mi familia. También me entrenó mi madre desde pequeño —explicó—. ¡Un momento, que voy a ver cómo va la pizza! —Se levantó, se fue a la cocina y vino un momento después—. Nada, aún le queda un poquillo.
—¡Vaya, increíble! —le sonrió Daruu, fascinado.
El muchacho le confesó que aún estaba tratando de controlar varias a la vez. Daruu opinaba que ya se le daba bastante bien. Lo había pasado mal durante el combate. Estaba a punto de contestarle eso mismo cuando el kusajin deseó dejar de hablar de él y se interesó por la habilidad de Daruu con el Suiton.
—¿Ah, sí? —dijo, hinchado como un pavo, acariciándose el bajo de la nariz con el dedo índice—. El Suiton es la especialidad de mi familia. También me entrenó mi madre desde pequeño —explicó—. ¡Un momento, que voy a ver cómo va la pizza! —Se levantó, se fue a la cocina y vino un momento después—. Nada, aún le queda un poquillo.