27/05/2019, 15:17
Cuando supo que la comida estuvo lista, el clon hizo lo necesario para sacarla del horno sin quemarse en el intento, y trató de rebanarla en cortes poco uniformes para facilitarle a Kaido que lo ingiriera. El bunshin detrás de los paganos aumentó su vigilia mientras el Kaido real empezaba a masticar la carne, con poco sabor cabe destacar, aunque nutritiva al fin y al cabo.
—¡Joder! ¡sabe a gloria! —murmulló por lo bajo.
—¡Joder! ¡sabe a gloria! —murmulló por lo bajo.