22/07/2019, 23:04
Al entrar, vería de inmediato a Rao y a Yukari en el comedor. La mujer estaba mucho más arreglada, pues se recogió el cabello en una trenza y además portaba ahora sandalias. El hombre de la casa por su lado, seguía igual de fachudo. Ambos voltearon a la puerta, extrañados de que Etsu entrara con tanta facilidad a la estancia.
—¡Ay dios mío dejaste la puerta abierta!— La mujer se llevó ambas manos a la cara y observó a Rao.
—Tranquila mujer, que total, aquí estamos nosotros nomás entrar— Se inclinó para acercarse y acariciarle la cabeza. —¡Qué bueno verte de vuelta Kito!— Se levantó para recibirlo. —Dame eso, yo voy a ir a guardarlo. Mientras toma asiento, que logramos estirar un poco la porción de pollo para ti. Hay alguna razón también para el amiguito— Se le quedó viendo a Akane para luego pasar de nuevo si vista al Inuzuka, y susurrar sin que la fémina los oyese. —Se creyó el cuento de que vienes a ayudarme a transportar las mercancías, así que por ahora estamos seguros con eso— le guiñó el ojo mientras tomaba las bolsas de las compras y se daba la vuelta en dirección a la cocina.
—Ay, perdón por lo de antes— La mujer se levantó y realizó una reverencia mientras sus mejillas estaban enrojecidas. —Permíteme presentarme como se debe, soy Kusakabe Yukari. Muchas gracias por aceptar trabajar con mi marido, realmente nos hace mucha falta y tu apoyo será invaluable— Se irguió y se acomodó unos pocos cabellos. —Toma asiento, ahorita les sirvo un poco de guiso— sonrió.
—¡Ay dios mío dejaste la puerta abierta!— La mujer se llevó ambas manos a la cara y observó a Rao.
—Tranquila mujer, que total, aquí estamos nosotros nomás entrar— Se inclinó para acercarse y acariciarle la cabeza. —¡Qué bueno verte de vuelta Kito!— Se levantó para recibirlo. —Dame eso, yo voy a ir a guardarlo. Mientras toma asiento, que logramos estirar un poco la porción de pollo para ti. Hay alguna razón también para el amiguito— Se le quedó viendo a Akane para luego pasar de nuevo si vista al Inuzuka, y susurrar sin que la fémina los oyese. —Se creyó el cuento de que vienes a ayudarme a transportar las mercancías, así que por ahora estamos seguros con eso— le guiñó el ojo mientras tomaba las bolsas de las compras y se daba la vuelta en dirección a la cocina.
—Ay, perdón por lo de antes— La mujer se levantó y realizó una reverencia mientras sus mejillas estaban enrojecidas. —Permíteme presentarme como se debe, soy Kusakabe Yukari. Muchas gracias por aceptar trabajar con mi marido, realmente nos hace mucha falta y tu apoyo será invaluable— Se irguió y se acomodó unos pocos cabellos. —Toma asiento, ahorita les sirvo un poco de guiso— sonrió.
![[Imagen: 7FT8VMk.gif]](https://i.imgur.com/7FT8VMk.gif)
