18/09/2019, 01:24
El gyojin contempló los resultados de su temeridad: que apenas un puñado de Orcas, sobre todo las más jóvenes, quisieran ir tras él. Lo curioso es que, a diferencia de otras familias de animales, ahí tendrían a una de mayor edad que probablemente se daría cuenta de sus intenciones. Y así se lo hizo saber esa orca hembra que regañó a los otros y tomó la batuta de la... ¿conversación?
¿acaso actuaba civilizadamente?
—¿Quién dijo que era vuestro territorio? —respondió, mientras nadaba corriente atrás para impedir que le rodeasen. Si lo hacía, si se dejaba envolver por las putas orcas; estaba muerto. Muertísimo—. es... nuestro. ¡Nuestro!
¿acaso actuaba civilizadamente?
—¿Quién dijo que era vuestro territorio? —respondió, mientras nadaba corriente atrás para impedir que le rodeasen. Si lo hacía, si se dejaba envolver por las putas orcas; estaba muerto. Muertísimo—. es... nuestro. ¡Nuestro!