24/09/2019, 09:41
La Reina esbozó una sonrisa sangrienta.
—Oh, no, Kaido. Esto tan solo acaba de empezar.
Pero probablemente sí había acabado por aquel día. La encerrona había sido tal, con un movimiento pinza de manual, que ninguna orca fue capaz de escapar de la masacre. Los tiburones habían planeado —e incluso practicado— aquel ataque con mucho cuidado y mimo, y los resultados saltaban a la vista.
Eso sí, las pérdidas fueron inevitables. Siempre lo eran. Osuushi llegó hasta la Reina e informó que habían perdido a cuatro de los suyos. Cuatro suyos por treinta orcas: las cuentas iban bien.
Como había ordenado, los tiburones dejaron vivo a una orca. Un adolescente no más grande que Corozzio. Se encontraba en un estado visible de shock, confuso, como si estuviese sufriendo una pesadilla de la que no era participe. Le condujeron hasta la Reina y se quedó alli plantado, como una medusa.
—Hoy es tu día de suerte, chico —Acababan de matar a su padre, a su madre y a su hermana. Pero la Reina no estaba siendo irónica—. Hoy vivirás, orca. Vuelve. Vuelve con los tuyos y cuéntales lo que ha pasado aquí. Cuéntale a Goddoza cómo aniquilé a cada uno de los tuyos. Dile de mi parte que los años en los que hacía lo que le salía de la aleta se han terminado. Dile que hoy hemos dicho basta. Dile que hoy hay una nueva reina en el océano. —La Reina le dio un segundo—. ¡¿Me has entendido, chico?!
—¡S-sí! De... ¿De parte de quién le digo que es?
—¡¿Cómo osas?! —rugió Osuushi, dando un mordisco al agua tan cercano a la orca que casi le arranca una aleta—. Cuando hables con la Reina te dirigirás a ella como Reina, ¿me oyes?
— S-sí. Cómo... ¿Cómo digo que se llama, reina?
La Reina del Océano sonrió con suficiencia.
—Por el único nombre que tengo. Reina. Dile que el mensaje proviente de Reina. La Reina del Océano.
—¡Mi Reina! ¡Mi Reina! ¡Mi Reina! —gritaron todos al unísono. Y siguieron gritando, hasta que la pobre orca no fue más que una pulga en la lejanía.
—¡Kaido! —le llamó—. ¿Y Scylio? ¿Consiguió llegar?
—Oh, no, Kaido. Esto tan solo acaba de empezar.
Pero probablemente sí había acabado por aquel día. La encerrona había sido tal, con un movimiento pinza de manual, que ninguna orca fue capaz de escapar de la masacre. Los tiburones habían planeado —e incluso practicado— aquel ataque con mucho cuidado y mimo, y los resultados saltaban a la vista.
Eso sí, las pérdidas fueron inevitables. Siempre lo eran. Osuushi llegó hasta la Reina e informó que habían perdido a cuatro de los suyos. Cuatro suyos por treinta orcas: las cuentas iban bien.
Como había ordenado, los tiburones dejaron vivo a una orca. Un adolescente no más grande que Corozzio. Se encontraba en un estado visible de shock, confuso, como si estuviese sufriendo una pesadilla de la que no era participe. Le condujeron hasta la Reina y se quedó alli plantado, como una medusa.
—Hoy es tu día de suerte, chico —Acababan de matar a su padre, a su madre y a su hermana. Pero la Reina no estaba siendo irónica—. Hoy vivirás, orca. Vuelve. Vuelve con los tuyos y cuéntales lo que ha pasado aquí. Cuéntale a Goddoza cómo aniquilé a cada uno de los tuyos. Dile de mi parte que los años en los que hacía lo que le salía de la aleta se han terminado. Dile que hoy hemos dicho basta. Dile que hoy hay una nueva reina en el océano. —La Reina le dio un segundo—. ¡¿Me has entendido, chico?!
—¡S-sí! De... ¿De parte de quién le digo que es?
—¡¿Cómo osas?! —rugió Osuushi, dando un mordisco al agua tan cercano a la orca que casi le arranca una aleta—. Cuando hables con la Reina te dirigirás a ella como Reina, ¿me oyes?
— S-sí. Cómo... ¿Cómo digo que se llama, reina?
La Reina del Océano sonrió con suficiencia.
—Por el único nombre que tengo. Reina. Dile que el mensaje proviente de Reina. La Reina del Océano.
—¡Mi Reina! ¡Mi Reina! ¡Mi Reina! —gritaron todos al unísono. Y siguieron gritando, hasta que la pobre orca no fue más que una pulga en la lejanía.
—¡Kaido! —le llamó—. ¿Y Scylio? ¿Consiguió llegar?
![[Imagen: ksQJqx9.png]](https://i.imgur.com/ksQJqx9.png)
¡Agradecimientos a Daruu por el dibujo de PJ y avatar tan OP! ¡Y a Reiji y Ayame por la firmaza! Si queréis una parecida, este es el lugar adecuado