24/09/2019, 17:46
Mientras Cuervo hablaba Kazui encendía el cigarro, torpemente. Tomo una calada larga, como suele hacerse cuando observas a un fumador con experiencia… y tosió. No fue solamente el humo. El sabor del tabaco por primera vez es … desagradable. Acartona la lengua.
-Cof, cof. No sé si podría acostumbrarme a esto. “Uf, demasiado para mi quizá”
Con una serie de movimientos meditados, su rival se hizo con la victoria al son de un jaque mate. -No lo he visto venir… sentenció el muchacho. “Si, me tenía en su mano desde hace tiempo, pero esto… definitivamente no es un cualquiera”
Los aplausos no le molestaron, al fin y al cabo, había disfrutado mucho. Las palmadas de consolación… para un tipo de su constitución fueron algo más de lo que esperaba. La tos volvió, pero el genin intentó fumar de nuevo. Una calada más corta y el mismo sabor fuerte.
-Jajajaja no, no. En efecto, Kusagakure es mi hogar, y no, estas buenas personas no son la razón- afirmó esforzándose por caer bien. -Era una simple misión de mensajero que me trajo cerca, y necesitaba beber algo. “Me cae bien, pero no voy a darle detalles de lo que hace un shinobi por aquí. No sé si puedo, pero sé que no debo.” Pensaba, justificándose a sí mismo.En cuanto recogieron las piezas y los platos estaban servidos, el olor de la comida casi eclipsaba el de su cigarro. Tomo una calada más, aunque casi por compromiso. Para su sorpresa esta no le supo tan mal. Dejó el cigarro y comenzó a comer. No era el mejor plato que había comido nunca, pero estaba muy bueno. El arroz era posiblemente más fresco que el que se comía lejos de los arrozales. -Bueno Cuervo. Quizá nos volvamos a encontrar otra vez, y la batalla esté más nivelada. - “Ahora que lo he probado, quiero jugar más”
-¿Puedo hacerte una pregunta… algo más personal?- dijo de manera algo tímida- sobre ese adorno que llevas en la oreja “Lo último que quiero que piense es que le preguntaría por su cicatriz…”
Si la respuesta no se daba, solo había que cambiar de tema, o hablar de la partida. Sinceramente él era la persona más interesante del local.
-Cof, cof. No sé si podría acostumbrarme a esto. “Uf, demasiado para mi quizá”
Con una serie de movimientos meditados, su rival se hizo con la victoria al son de un jaque mate. -No lo he visto venir… sentenció el muchacho. “Si, me tenía en su mano desde hace tiempo, pero esto… definitivamente no es un cualquiera”
Los aplausos no le molestaron, al fin y al cabo, había disfrutado mucho. Las palmadas de consolación… para un tipo de su constitución fueron algo más de lo que esperaba. La tos volvió, pero el genin intentó fumar de nuevo. Una calada más corta y el mismo sabor fuerte.
-Jajajaja no, no. En efecto, Kusagakure es mi hogar, y no, estas buenas personas no son la razón- afirmó esforzándose por caer bien. -Era una simple misión de mensajero que me trajo cerca, y necesitaba beber algo. “Me cae bien, pero no voy a darle detalles de lo que hace un shinobi por aquí. No sé si puedo, pero sé que no debo.” Pensaba, justificándose a sí mismo.En cuanto recogieron las piezas y los platos estaban servidos, el olor de la comida casi eclipsaba el de su cigarro. Tomo una calada más, aunque casi por compromiso. Para su sorpresa esta no le supo tan mal. Dejó el cigarro y comenzó a comer. No era el mejor plato que había comido nunca, pero estaba muy bueno. El arroz era posiblemente más fresco que el que se comía lejos de los arrozales. -Bueno Cuervo. Quizá nos volvamos a encontrar otra vez, y la batalla esté más nivelada. - “Ahora que lo he probado, quiero jugar más”
-¿Puedo hacerte una pregunta… algo más personal?- dijo de manera algo tímida- sobre ese adorno que llevas en la oreja “Lo último que quiero que piense es que le preguntaría por su cicatriz…”
Si la respuesta no se daba, solo había que cambiar de tema, o hablar de la partida. Sinceramente él era la persona más interesante del local.