24/10/2019, 21:01
Era de esperarse que ninguno de los dos supiera el camino adecuado, aunque sólo Karamaru hizo algo al respecto, pues le pidió indicaciones a uno de los puesteros. A gritos.
Aunque la respuesta fue positiva, varios transeúntes dirigieron su mirada al dúo. Ranko sintió el carmesí regresar a su rostro. ¿En serio tenía que haber gritado? ¿No podían haberse acercado al hombre y ya? Aunque la gente pronto se olvidó de los dos, pues los genin tomaron el camino que iba a la ciudad, sin más. A pesar de ello, la Kusajin aún percibía sus miradas, persiguiendola cual fantasmas.
Ranko había querido preguntarle al chico qué significaba eso de boluda. ¿Era un insulto? ¿Algo familiar o coloquial? Pero tanto el estar abrumada por el grito como las preguntas de Karamaru ahogaron su duda.
—Ahm… Eh… Y-Nosotras… —Ranko dudó un momento. No sabía si era apropiado contar una pelea familiar con alguien que apenas había conocido. Aunque por otro lado, Karamaru era bastante simpático, aunque algo insolente; y podría tener razón: contar su historia podría ayudarle a practicar el hablar con otros. Ranko se aclaró la garganta quedamente —. E-está bien. Kuumi y yo habíamos… E-estábamos en Yugakure. Queríamos visitar las… las aguas termales. De-de vacaciones. Y… Y nos encontramos con…
Ranko juntó las manos, jugueteando con sus pulgares. Los recuerdos veraniegos le llegaban frescos, como si hubiese sido el día anterior. Sus mejillas se colorearon de un lindo tono rosado, no de vergüenza como antes, sino de la tierna pena de quien habla de alguien querido.
—Con una persona. B-bueno, yo me encontré con ella. Kuumi se había separado para… para… ahm… creo que fue a explorar la-las termas en lo que y-yo comía. E-en fin. Me e-e-encontré con una… una chica llamada Mei. Y-y-y… ella fue tan… tan amable conmigo. Y me entendió. Y-y me ayudó un poco a-a superarme, a-aunque fuese un poquito, y… cuando Kuumi regresó, ella… no podía entender lo mucho que Mei-san y yo ha-habíamos congeniado… La acusó de usar Genjutsu en mí… ¡Y le dijo cosas muy feas a Mei-san! ¡Un insulto enorme! ¡Y yo no podía…!
Se dio cuenta de que había subido la voz un poco. Bajó su volumen, apenada, antes de continuar.
—No podía de-dejar que le dijera esas cosas. A-así que… la enfrenté. Y le dije que Mei-san no s-se merecía ese trato… ¡Que se disculpara! M-Me enojé tanto con Kuumi por ello...
Ranko suspiró. Había sido un mal momento, aunque todo hubiese terminado bien. Recordó lo bien que se habían llevado después, y pensó que tal vez su relación de hermanas hubiese mejorado gracias a su pelea.
Aunque la respuesta fue positiva, varios transeúntes dirigieron su mirada al dúo. Ranko sintió el carmesí regresar a su rostro. ¿En serio tenía que haber gritado? ¿No podían haberse acercado al hombre y ya? Aunque la gente pronto se olvidó de los dos, pues los genin tomaron el camino que iba a la ciudad, sin más. A pesar de ello, la Kusajin aún percibía sus miradas, persiguiendola cual fantasmas.
Ranko había querido preguntarle al chico qué significaba eso de boluda. ¿Era un insulto? ¿Algo familiar o coloquial? Pero tanto el estar abrumada por el grito como las preguntas de Karamaru ahogaron su duda.
—Ahm… Eh… Y-Nosotras… —Ranko dudó un momento. No sabía si era apropiado contar una pelea familiar con alguien que apenas había conocido. Aunque por otro lado, Karamaru era bastante simpático, aunque algo insolente; y podría tener razón: contar su historia podría ayudarle a practicar el hablar con otros. Ranko se aclaró la garganta quedamente —. E-está bien. Kuumi y yo habíamos… E-estábamos en Yugakure. Queríamos visitar las… las aguas termales. De-de vacaciones. Y… Y nos encontramos con…
Ranko juntó las manos, jugueteando con sus pulgares. Los recuerdos veraniegos le llegaban frescos, como si hubiese sido el día anterior. Sus mejillas se colorearon de un lindo tono rosado, no de vergüenza como antes, sino de la tierna pena de quien habla de alguien querido.
—Con una persona. B-bueno, yo me encontré con ella. Kuumi se había separado para… para… ahm… creo que fue a explorar la-las termas en lo que y-yo comía. E-en fin. Me e-e-encontré con una… una chica llamada Mei. Y-y-y… ella fue tan… tan amable conmigo. Y me entendió. Y-y me ayudó un poco a-a superarme, a-aunque fuese un poquito, y… cuando Kuumi regresó, ella… no podía entender lo mucho que Mei-san y yo ha-habíamos congeniado… La acusó de usar Genjutsu en mí… ¡Y le dijo cosas muy feas a Mei-san! ¡Un insulto enorme! ¡Y yo no podía…!
Se dio cuenta de que había subido la voz un poco. Bajó su volumen, apenada, antes de continuar.
—No podía de-dejar que le dijera esas cosas. A-así que… la enfrenté. Y le dije que Mei-san no s-se merecía ese trato… ¡Que se disculpara! M-Me enojé tanto con Kuumi por ello...
Ranko suspiró. Había sido un mal momento, aunque todo hubiese terminado bien. Recordó lo bien que se habían llevado después, y pensó que tal vez su relación de hermanas hubiese mejorado gracias a su pelea.
Pensamientos (Plum) ✧ Diálogos (PaleVioletRed)