26/11/2019, 23:41
Afortunadamente, en lo alto del edificio había un par de ventanales amplios que hacían las veces de tragaluz... y de lugar perfecto para espiar. La kunoichi descendió y se posó con la máxima delicadeza que fue capaz para no despertar ningún ruido sospechoso. De rodillas, se inclinó para ver mejor lo que ocurría en el interior de aquel sitio.
El galpón parecía ser una suerte de almacén. Decenas y decenas de cajas se apilaban aquí y allá, dispersos entre neveras industriales y correas que transportaban lo que quiera que fuera su mercancía.
«¿Crees que será una fábrica de pescado, Kokuō?»
«¿Me ve con cara de importarme los asuntos de los humanos, Señorita?»
«Gracias, eres de mucha ayuda.» Ayame torció el gesto, contrariada.
Y en ese momento se fijó en el grupo de marineros al que venía persiguiendo. El supuesto capitán le estaba dando la mano a un hombre corpulento que vestía un delantal blanco, botas y pantalones de pesca. Desde allí no sería capaz de escuchar de lo que estaban hablando, pero lo que le llamó la atención a Ayame fueron las cajas que varios hombres habían comenzado a revisar. Entrecerró los ojos, tratando de agudizar la vista. Si lograba ver qué era podría comprobar si de verdad era una fábrica de procesado de pescado o...
El galpón parecía ser una suerte de almacén. Decenas y decenas de cajas se apilaban aquí y allá, dispersos entre neveras industriales y correas que transportaban lo que quiera que fuera su mercancía.
«¿Crees que será una fábrica de pescado, Kokuō?»
«¿Me ve con cara de importarme los asuntos de los humanos, Señorita?»
«Gracias, eres de mucha ayuda.» Ayame torció el gesto, contrariada.
Y en ese momento se fijó en el grupo de marineros al que venía persiguiendo. El supuesto capitán le estaba dando la mano a un hombre corpulento que vestía un delantal blanco, botas y pantalones de pesca. Desde allí no sería capaz de escuchar de lo que estaban hablando, pero lo que le llamó la atención a Ayame fueron las cajas que varios hombres habían comenzado a revisar. Entrecerró los ojos, tratando de agudizar la vista. Si lograba ver qué era podría comprobar si de verdad era una fábrica de procesado de pescado o...