21/01/2020, 20:53
(Última modificación: 21/01/2020, 20:56 por Taka Kisame. Editado 1 vez en total.)
Pasaría lentamente por el umbral para, una vez en aquella estancia, escuchar como la pesada puerta se cerraba tras de sí. Parecía un lugar bastante antiguo pero también seguro, eso no lo había dudado en ningún momento. No obstante, le daba un poco de lástima que no hubiese la misma sensación de seguridad en las calles de aquel pueblo donde los delincuentes paseaban por las tabernas a sus anchas. Caminó un par de metros en la sala, observando cada detalle hasta que se fijó en la dirección que le habían indicado. Parecía iluminada por medios modernos. Era una especie de despacho con buen gusto para la decoración y una pequeña biblioteca dentro. Seguramente el tipo que repiqueteaba la antigua máquina de escribir era el pez gordo de la zona, así que intentaría hablarle con educación para no dejar ne mal lugar a su aldea.
Entró a la sala despacio, sin apartar la mirada del hombre que escribía. Su gesto era neutro y sus manos se escondían bajo las anchas mangas que colgaban de su túnica. El tipo estaba trabajando así que no quiso sobresaltarle.
-Me ha llamado? -Se limitó a decir sin apartar su inquisitiva mirada de él -Siento no haber venido antes, me tenían muy sedado en el hospital -Dijo sin saber realmente cuanto tiempo llevaba inconsciente allí.
No quiso añadir más, primero quería escuchar lo que aquel hombre tenía que decirle. Sería de muy mala educación entrar al despacho de alguien así inundándole a preguntas y más aún si era el a quien habían llamado para que acudiera a aquella improvisada audiencia. Era alguien importante, así que estudió hasta el último detalle de su vestimenta y de la decoración de su escritorio. Siempre había sabido que ese tipo de cosas dicen mucho de la persona.
Entró a la sala despacio, sin apartar la mirada del hombre que escribía. Su gesto era neutro y sus manos se escondían bajo las anchas mangas que colgaban de su túnica. El tipo estaba trabajando así que no quiso sobresaltarle.
-Me ha llamado? -Se limitó a decir sin apartar su inquisitiva mirada de él -Siento no haber venido antes, me tenían muy sedado en el hospital -Dijo sin saber realmente cuanto tiempo llevaba inconsciente allí.
No quiso añadir más, primero quería escuchar lo que aquel hombre tenía que decirle. Sería de muy mala educación entrar al despacho de alguien así inundándole a preguntas y más aún si era el a quien habían llamado para que acudiera a aquella improvisada audiencia. Era alguien importante, así que estudió hasta el último detalle de su vestimenta y de la decoración de su escritorio. Siempre había sabido que ese tipo de cosas dicen mucho de la persona.