10/02/2020, 02:02
Despedida del 219
Granizaba. Pedruscos de hielo que caían de todas partes, arrastrados por vientos huracanados que levantaban olas tan gigantescas que bien podían ser las hermanas pequeñas de un tsunami. El Gran Dragón, como así le habían bautizado algunos de los suyos, permanecía en lo alto del acantilado, como queriendo desafiar a la naturaleza. Estaba desnudo de cintura para arriba, mostrando sus grandes y recuperados músculos, que se movían como engranajes perfectamente sincronizados mientras danzaba con la Dai Tsuchi repartiendo golpes en el aire a un enemigo invisible.
Un golpe. Y otro golpe. Y otro. Levantaba la más pesada de las armas con una facilidad pasmosa y la hacía bajar con la contundencia de una avalancha. Oh, sí, Ryū estaba de vuelta. Con el último movimiento, dejó la cabeza de su martillo de guerra en el suelo, apoyando las manos en la base del mango.
Alguien acababa de llegar.
—¿Sabes para qué te he llamado?
![[Imagen: S0pafJH.png]](https://imgfz.com/i/thumbnail/S0pafJH.png)