12/02/2020, 13:18
—Poco puedo decir sobre mí, la verdad... Nabi se retiró, ahora se dedica a cuidar y recoger perros heridos para entrenarlos, es bastante feliz. Él y yo salimos durante un tiempo, pero no duró mucho.
Vaya... Eso explicaba por que no había visto a Nabi en tanto tiempo, pero también fue una sorpresa lo de su relación fallida. No pregunté mas por que sabía a la perfección lo delicados que eran esos temas.
—. Luego me marché en busca de Uchiha Akame, pues no estaba muerto... Pero mis esfuerzos fueron algo vanos, ya que regresé con mis manos vacías, así que ahora estoy entrenando más que nunca para poder volver a intentar cumplir mi misión.
—No hace falta que seas discreta, conozco lo que pasó con Akame, pero no sabia que te habían encargado a ti cazarlo. No te preocupes, deber ser muy escurridizo, pero seguro que terminas por atraparlo.
Si no lo hacía Datsue primero. Aunque por la relación que tenia con Akame se podría pensar que Datsue dudaría en cortarle la cabeza, cuando habíamos hablado al lado de su tumba, me había dejado bien claro que yo tenia mas fe en que Akame no fuera un traidor de verdad de la que él mismo tenia.
—¿Y tú, Reiji-kun? ¿Qué ha sido de ti en este tiempo? ¿Y Sakura?
Sabía que saldría el tema en algún momento. Sakura bueno... Últimamente había estado mas rara que de costumbre, quizás... Quizás se había dado cuenta de algo. Aunque igual yo estaba paranoico y se trataba de otra cosa.
—Debe estar por la casa trabajando, ella es una de nuestras criadas. Pero ya no estamos juntos tampoco. —No era necesario profundizar mas en el tema. Quizás mas adelante podría contarle todo lo de Yuuna. —A mi me mandaron acompañar a Katsudon en un viaje al pais del Hierro, no como una misión. La verdad es que no lo hice muy bien, pero bueno al final no fue tan malo y también tengo que hacerme mas fuerte para volver allí.
Por que al final las cosas habían salido más o menos bien, al menos para mi. Pero, como Eri, algún día tendría que volver.
No tardamos mucho mas en alcanzar el Dojo, que, visto de cerca era bastante grande, la verdad, al menos en cuanto al ancho y el largo, por que de los tres, era el único edificio de una sola planta.
Como esperaba, no había nadie entrenando allí a esas horas. El sitio estaba dividido en varios tatamis. Allí practicaba algunas artes marciales y kenjutsu junto a mi madre o solo, y ahora, junto a Yuuna.
Pegados a las paredes, había recipientes que contenian distintas armas preparadas para practicar, como armas de madera y bokkens o armas con el filo romo para poder darlo todo sin matar a nadie. Aunque los moretones dolían igualmente.
—Pues ya estamos... Te voy a ir dejando de uno en uno diferentes tipos de Naginata y tendrás que hacer un par de movimientos ¿Has utilizado una alguna vez?
Vaya... Eso explicaba por que no había visto a Nabi en tanto tiempo, pero también fue una sorpresa lo de su relación fallida. No pregunté mas por que sabía a la perfección lo delicados que eran esos temas.
—. Luego me marché en busca de Uchiha Akame, pues no estaba muerto... Pero mis esfuerzos fueron algo vanos, ya que regresé con mis manos vacías, así que ahora estoy entrenando más que nunca para poder volver a intentar cumplir mi misión.
—No hace falta que seas discreta, conozco lo que pasó con Akame, pero no sabia que te habían encargado a ti cazarlo. No te preocupes, deber ser muy escurridizo, pero seguro que terminas por atraparlo.
Si no lo hacía Datsue primero. Aunque por la relación que tenia con Akame se podría pensar que Datsue dudaría en cortarle la cabeza, cuando habíamos hablado al lado de su tumba, me había dejado bien claro que yo tenia mas fe en que Akame no fuera un traidor de verdad de la que él mismo tenia.
—¿Y tú, Reiji-kun? ¿Qué ha sido de ti en este tiempo? ¿Y Sakura?
Sabía que saldría el tema en algún momento. Sakura bueno... Últimamente había estado mas rara que de costumbre, quizás... Quizás se había dado cuenta de algo. Aunque igual yo estaba paranoico y se trataba de otra cosa.
—Debe estar por la casa trabajando, ella es una de nuestras criadas. Pero ya no estamos juntos tampoco. —No era necesario profundizar mas en el tema. Quizás mas adelante podría contarle todo lo de Yuuna. —A mi me mandaron acompañar a Katsudon en un viaje al pais del Hierro, no como una misión. La verdad es que no lo hice muy bien, pero bueno al final no fue tan malo y también tengo que hacerme mas fuerte para volver allí.
Por que al final las cosas habían salido más o menos bien, al menos para mi. Pero, como Eri, algún día tendría que volver.
No tardamos mucho mas en alcanzar el Dojo, que, visto de cerca era bastante grande, la verdad, al menos en cuanto al ancho y el largo, por que de los tres, era el único edificio de una sola planta.
Como esperaba, no había nadie entrenando allí a esas horas. El sitio estaba dividido en varios tatamis. Allí practicaba algunas artes marciales y kenjutsu junto a mi madre o solo, y ahora, junto a Yuuna.
Pegados a las paredes, había recipientes que contenian distintas armas preparadas para practicar, como armas de madera y bokkens o armas con el filo romo para poder darlo todo sin matar a nadie. Aunque los moretones dolían igualmente.
—Pues ya estamos... Te voy a ir dejando de uno en uno diferentes tipos de Naginata y tendrás que hacer un par de movimientos ¿Has utilizado una alguna vez?
![[Imagen: ksQJqx9.png]](https://i.imgur.com/ksQJqx9.png)