26/02/2020, 16:29
Ranko ni se inmutó por las palabras de Hana, como si esas cosas no existiesen y Daigo no hubiese desaparecido misteriosamente justo en su cara.
—. N-no sé si ésos existen. Pero sí hay animales, b-bestias, como jabalíes. Y hay personas
— ¿Los animalitos? Pero, ¡si son unos santos! ¿Y los jabalies? ¿Nunca has visto a sus crias? Son pequeñitas y super adorables. Y los adultos con esos colmillos tan grandes chocandose unos con otros durante el celo, son super graciosos. — dijo la kunoichi imitando los colmillos con sus dedos indices. — Pero las personas sí, puedes darles una patada en cuanto aparezcan.
Hana río ante la imagen de Ranko dando patadas a lo primero que apareciese. Pero poco le duró la risa porque una brisa helada atravesó el bosque desde su espalda, se giró esperando ver un fantasma, pero no vio más que hojas revoloteando por la corriente.
— ¿Has-has sentido eso, Ranko-san? — miraba de un lado a otro, esperando el inevitable encuentro con un Daigo del más allá. — ¿Y si el espiritu de Daigo-san nos está persiguiendo por haberle perdido en el bosque?
—. N-no sé si ésos existen. Pero sí hay animales, b-bestias, como jabalíes. Y hay personas
— ¿Los animalitos? Pero, ¡si son unos santos! ¿Y los jabalies? ¿Nunca has visto a sus crias? Son pequeñitas y super adorables. Y los adultos con esos colmillos tan grandes chocandose unos con otros durante el celo, son super graciosos. — dijo la kunoichi imitando los colmillos con sus dedos indices. — Pero las personas sí, puedes darles una patada en cuanto aparezcan.
Hana río ante la imagen de Ranko dando patadas a lo primero que apareciese. Pero poco le duró la risa porque una brisa helada atravesó el bosque desde su espalda, se giró esperando ver un fantasma, pero no vio más que hojas revoloteando por la corriente.
— ¿Has-has sentido eso, Ranko-san? — miraba de un lado a otro, esperando el inevitable encuentro con un Daigo del más allá. — ¿Y si el espiritu de Daigo-san nos está persiguiendo por haberle perdido en el bosque?