3/03/2020, 03:14
Dos hombres disfrutaban la brisa del aire que rompía en sus rostro al moverse a gran velocidad por el camino. Detrás suyo una carga pesada, delante varios caballos que la empujaban y junto a ello a los transportistas. Un viaje tranquilo por el interior del país de la Tierra con varias descargas y cobros para luego volver a Notsuba con dulces ryos para proveer a sus familias. Una obstinada princesa estaba determinada a no dejar que aquello sucediese de manera calma.
Un grito a sus espaldas rompió la monotonía del galopar de los caballos junto a golpes que claramente eran al carro que llevaban detrás. Se miraron, el conductor miró a sus caballos declarando que esa era su responsabilidad, el acompañante un poco acojonado asintió con dudas y se asomó por el costado evitando el pequeño saliente en lo alto del carromato que les daba sombra. Tomó la escalerita que tenían junto al puesto delantero de conducción y miró el techo.
— ¡Pero niña! ¿¡Qué mierda andas haciendo!? ¿¡De dónde has salido siquiera!?— ver a una joven rápidamente le bajo los nervios, verla tirada en el techo golpeando cansada el suelo también, pero siguió colgado de los barrotes de la escalera sin intenciones de acercarse a la mujer que se encontraba en la otra punta del carro. Los altos y bajos del camino no le dejaban a un hombre como él mantener el equilibrio ante tanto movimiento.
Un grito a sus espaldas rompió la monotonía del galopar de los caballos junto a golpes que claramente eran al carro que llevaban detrás. Se miraron, el conductor miró a sus caballos declarando que esa era su responsabilidad, el acompañante un poco acojonado asintió con dudas y se asomó por el costado evitando el pequeño saliente en lo alto del carromato que les daba sombra. Tomó la escalerita que tenían junto al puesto delantero de conducción y miró el techo.
— ¡Pero niña! ¿¡Qué mierda andas haciendo!? ¿¡De dónde has salido siquiera!?— ver a una joven rápidamente le bajo los nervios, verla tirada en el techo golpeando cansada el suelo también, pero siguió colgado de los barrotes de la escalera sin intenciones de acercarse a la mujer que se encontraba en la otra punta del carro. Los altos y bajos del camino no le dejaban a un hombre como él mantener el equilibrio ante tanto movimiento.
◘ Hablo ◘ Pienso ◘ Telepatía ◘