[Dojos 220, 1º div, Iniciales] Daigo vs Datsue

Otoño-Invierno de 221

Fecha fijada indefinidamente con la siguiente ambientación: Los ninjas de las Tres Grandes siguen luchando contra el ejército de Kurama allá donde encuentran un bastión sin conquistar. Debido a las recientes provocaciones del Nueve Colas, los shinobi y kunoichi atacan con fiereza en nombre de la victoria. Kurama y sus generales se encuentran acorralados en las Tierras Nevadas del Norte, en el País de la Tormenta. Pero el invierno está cerca e impide que cualquiera de los dos bandos avance, dejando Oonindo en una situación de guerra fría, con pequeñas operaciones aquí y allá. Las villas requieren de financiación tras la pérdida de efectivos en la guerra, y los criminales siguen actuando sobre terreno salpicado por la sangre de aliados y enemigos, por lo que los ninjas también son enviados a misiones de todo tipo por el resto del mundo, especialmente aquellos que no están preparados para enfrentarse a las terribles fuerzas del Kyuubi.

Tema cerrado

[Dojos 220, 1º div, Iniciales] Daigo vs Datsue
TERMINADO. Ganador: Datsue

Tsukiyama Daigo Sin conexión

Genin de Kusa
Ninjas de Kusa

Nivel: 21
Exp: 58 puntos
Dinero: 800 ryōs

· Fue 40

· Pod 40

· Res 40

· Int 40

· Agu 40

· Car 70

· Agi 20

· Vol 90

· Des 50

· Per 50

1/04/2020, 17:31

No importaba cuánto tiempo estuviese esperando en su camerino, era demasiado largo para el boxeador. Los segundos allí dentro eran como años, y los minutos eran toda una eternidad que se pasó calentando, preparándose para el combate.

Había mucha gente en su categoría contra la que quería pelear, pero la duda sobre quién sería su rival no pasó por su cabeza ni por un instante. Ni siquiera había salido a la arena y solo pensaba en la victoria.

Podía pelear, podía ganar, tenía que hacerlo, iba a ganar, iba a ganar, iba a ganar.

Finalmente, un guardia abriría su puerta y lo guiaría hasta el terreno de combate mientras el joven se ajustaba su bandana en la frente. Allí el ambiente era sobrecogedor y los gritos desde las gradas eran ensordecedores... o eso pensaba Daigo, que se sorpendió al escuchar ahogados los gritos, como si sonaran a muchísima más distancia de lo que deberían y en el recinto solo se encontraran él y quienquiera que fuera a cruzar la puerta que estaba al otro lado.

Dio un paso al frente, y levantó su puño a Kusagakure hasta que llegó a su posición, donde esperaría a su rival, totalmente libre de dudas.

Iba a ganar, iba a ganar, iba...