3/04/2020, 20:19
(Última modificación: 8/04/2020, 15:38 por Taka Kisame. Editado 2 veces en total.)
Las copias se movían lento. Aún así, tras la jugada del pelinegro había identificado su posición. Estaba a suficiente distancia de el aún como para que con un pequeño salto hacia atrás fuera suficiente para no recibir su técnica de lleno. No obstante, las copias si la recibieron, y comenzaron a duplicarse. Por cada una que era afectada, aparecían dos nuevas en su lugar, mientras seguían caminando implacables hacia su oponente, el cual no se había movido del sitio aún. Ahora había llegado el momento de utilizar su técnica contra él. Era obvio que no podía ver su posición, pero su enemigo tampoco podría ver la suya, así que se acercó lo suficiente a sus copias como para confundirse con ellas mientras hacía unos sellos.
-Doton: Retsudo Tenshō -Musitó en tono prácticamente inaudible.
El suelo delante de él comenzó a resquebrajarse, convirtiéndose en un infierno de pétreas cuchillas que alcanzarían a su objetivo sin siquiera él mismo ver la procedencia exacta por culpa de su nube de humo. Una vez hecho esto, y ya en una posición ventajosa simplemente continuó caminando hacia su oponente emulando de nuevo la velocidad de las copias. Ahora sería mucho mas difícil reconocerle, ya que el número era mayor y no habría podido verle intercambiar lugares con sus copias. La confusión como arma principal, no cabía duda.
-Doton: Retsudo Tenshō -Musitó en tono prácticamente inaudible.
El suelo delante de él comenzó a resquebrajarse, convirtiéndose en un infierno de pétreas cuchillas que alcanzarían a su objetivo sin siquiera él mismo ver la procedencia exacta por culpa de su nube de humo. Una vez hecho esto, y ya en una posición ventajosa simplemente continuó caminando hacia su oponente emulando de nuevo la velocidad de las copias. Ahora sería mucho mas difícil reconocerle, ya que el número era mayor y no habría podido verle intercambiar lugares con sus copias. La confusión como arma principal, no cabía duda.