21/04/2020, 22:29
—Espera, ¿¡CÓMOOOO!? —El kazejin se quedó sin palabras, lo único que pudo hacer fue echarse hacia atras y observar con temor la cara de instinto asesino de Saki.
La marionetista se le quedo viendo por unos instantes que se hicieron eternos, con aquel rostro ominoso y aquel brillo asesino de su ojo verde. De pronto, Saki bajo su pie de la mesa y comenzó a dar pasos, rodeándola para acercarse a Takumi. Cuando estuvo cerca, cuando su rostro era el de la mismísima parca, estallo en un río de carcajadas.
—¡Oh, cielos! Debiste de ver tu cara —dijo mientras reía con fuerza, y mientras una de sus trabajadoras suspiraba; su señora hacia uso de un sentido del humor bastante pesado cuando entraba en confianza—. Lo siento, solo era una broma.
—¿Una broma? —pregunto Kazuma con incredulidad—. Casi le mata del susto…
Aunque no menciono que él también se había asustado: por un instante pensó que presenciaría un asesinato y que tendrían que silenciarlo para que no contase nada. Pensó que quizá la maestra le incapacitase y luego lo dejara como divertimento para sus violentos empleados.
—Lo siento, lo siento —dijo haciendo una leve reverencia y una seña de disculpas con su única mano—. No pensé que fuesen a creérselo.
La marionetista se le quedo viendo por unos instantes que se hicieron eternos, con aquel rostro ominoso y aquel brillo asesino de su ojo verde. De pronto, Saki bajo su pie de la mesa y comenzó a dar pasos, rodeándola para acercarse a Takumi. Cuando estuvo cerca, cuando su rostro era el de la mismísima parca, estallo en un río de carcajadas.
—¡Oh, cielos! Debiste de ver tu cara —dijo mientras reía con fuerza, y mientras una de sus trabajadoras suspiraba; su señora hacia uso de un sentido del humor bastante pesado cuando entraba en confianza—. Lo siento, solo era una broma.
—¿Una broma? —pregunto Kazuma con incredulidad—. Casi le mata del susto…
Aunque no menciono que él también se había asustado: por un instante pensó que presenciaría un asesinato y que tendrían que silenciarlo para que no contase nada. Pensó que quizá la maestra le incapacitase y luego lo dejara como divertimento para sus violentos empleados.
—Lo siento, lo siento —dijo haciendo una leve reverencia y una seña de disculpas con su única mano—. No pensé que fuesen a creérselo.
![[Imagen: aab687219fe81b12d60db220de0dd17c.gif]](https://i.pinimg.com/originals/aa/b6/87/aab687219fe81b12d60db220de0dd17c.gif)