23/04/2020, 22:56
Durante unos largos y silenciosos segundos, Daigo no podía hacer más que preguntarse qué clase de persona —o ser, o cosa— abriría la puerta, por supuesto, ese largo silencio tan solo duró hasta que la puerta empezo a abrirse con un chirrido de ultratumba que sin lugar a dudas debía tratarse de los lamentos de un espíritu.
O quizá no, quizá solo había dejado que su imaginación volara demasiado.
—¿Quien demonios sois y qué coño quereis?
Daigo se sobresaltó, pero rápidamente recuperó la calma al comprobar que quien sacaba la cabeza por aquella puerta era solo un hombre mayor, no un fantasma o algun espíritu vengativo.
—¡Hola! —Saludó, sonriendo amigablemente a pesar de la cálida bienvenida—. Esto... siento molestar, pero nos hemos perdido. ¿Conoce el camino hacia el Valle de los Dojos?
O quizá no, quizá solo había dejado que su imaginación volara demasiado.
—¿Quien demonios sois y qué coño quereis?
Daigo se sobresaltó, pero rápidamente recuperó la calma al comprobar que quien sacaba la cabeza por aquella puerta era solo un hombre mayor, no un fantasma o algun espíritu vengativo.
—¡Hola! —Saludó, sonriendo amigablemente a pesar de la cálida bienvenida—. Esto... siento molestar, pero nos hemos perdido. ¿Conoce el camino hacia el Valle de los Dojos?
¡Muchas gracias a Nao por el sensual avatar y a Ranko por la pedazo de firma!
Team pescado.