26/04/2020, 23:57
-- Estrictamente, estrictamente... Me gustaría, no te lo puedo negar... — dijo avergonzada, apartando la mirada siguiéndole. — Pero me encantaría convertirme en uno; aunque eso si que es imposible, supongo que me tendre que conformar con ser la mejor espadachín de todo Oonindo — y para ello si que le quedaba un largo camino. — Aunque si me enfrentara a uno y le ganara con una gran maestría en la espada, dudo que se negase a enseñarme alguna que otra cosa ¿No crees?
Al pasar tras otra estantería y ver otra grandísima montaña de libros, no pudo evitar soltar un suspiró de exasperación.
— Esto no parece tener fin... — recogió otro libro desganada, poniendose de cuclillas. — ¿Dijiste que se llamaba Bayashi... ? ¿Hida? Joder, ojala pudiera pedirle que me entrenara aunque fuera un par de horas... Pero aunque sea recepcionista, dudo que pueda abandonar su puesto y menos por el tonto capricho de una genin — recogió todos los que tenía cerca de ella, aunque tuviera que se estiró algo perezosa para alcanzarlos; haciendo un pequeño monticulo.
Al pasar tras otra estantería y ver otra grandísima montaña de libros, no pudo evitar soltar un suspiró de exasperación.
— Esto no parece tener fin... — recogió otro libro desganada, poniendose de cuclillas. — ¿Dijiste que se llamaba Bayashi... ? ¿Hida? Joder, ojala pudiera pedirle que me entrenara aunque fuera un par de horas... Pero aunque sea recepcionista, dudo que pueda abandonar su puesto y menos por el tonto capricho de una genin — recogió todos los que tenía cerca de ella, aunque tuviera que se estiró algo perezosa para alcanzarlos; haciendo un pequeño monticulo.