2/05/2020, 17:24
El callejón paralelo tenía gente también, imposible hacer la jugada del mapache. Y por el final de la calle apareció el hombre al que estaban siguiendo, al kazejin se le heló la sangre. «Espera, ha... ¿Sonreído?» Pasó de largo.
—¿Crees que se ha dado cuenta? —Le susurró al amejin.
Su objetivo siguió caminando por la ciudad, mientras los genins le seguían a una distancia prudencial, pero al llegar a una plaza desierta se frenó en seco. Sus seguidores se acercaron más a él y ya en la plaza alzó la voz.
—Dejad de disimular... Sé que me seguís desde la taberna, estúpidos civiles, sois tan obvios... —Dijo con confianza y se colocó un cigarro en los labios, el cual encendió con la punta de su dedo. «¿Katon? Puede ser un serio problema para Mono si tenemos que combatir...» —A ver, ¿qué queréis? Ya no hago de mercenario, tengo contrato con Fakui. —Se giró hacia ellos, mirándoles fijamente. Parecía que esto le divertía.
—Eh... ¿Nosotros? —Miró asustado a Kisame, que parecía estar paralizado. —Estábamos nada más dando un paseo por la ciudad, llevaba mucho tiempo sin estar por aquí, no le estábamos siguiendo ni nada parecido. —Dijo lo más calmado que pudo.
—¿Crees que se ha dado cuenta? —Le susurró al amejin.
Su objetivo siguió caminando por la ciudad, mientras los genins le seguían a una distancia prudencial, pero al llegar a una plaza desierta se frenó en seco. Sus seguidores se acercaron más a él y ya en la plaza alzó la voz.
—Dejad de disimular... Sé que me seguís desde la taberna, estúpidos civiles, sois tan obvios... —Dijo con confianza y se colocó un cigarro en los labios, el cual encendió con la punta de su dedo. «¿Katon? Puede ser un serio problema para Mono si tenemos que combatir...» —A ver, ¿qué queréis? Ya no hago de mercenario, tengo contrato con Fakui. —Se giró hacia ellos, mirándoles fijamente. Parecía que esto le divertía.
—Eh... ¿Nosotros? —Miró asustado a Kisame, que parecía estar paralizado. —Estábamos nada más dando un paseo por la ciudad, llevaba mucho tiempo sin estar por aquí, no le estábamos siguiendo ni nada parecido. —Dijo lo más calmado que pudo.