2/05/2020, 21:05
Etsu estuvo meditándolo un poco, quizás demasiado poco. Estaba claro que después de todo lo que había liado, ésto traería repercusiones, de todos lados. Así pues, se asomó a la ventana para asegurarse de que nadie lo veía, y se lanzó de nuevo al suelo. En el mismo aire realizó una leve secuencia de sellos, y adoptó la forma de un perro. Se había transformado con un Henge en un labrador bastante viejuno, de piel dorada y bastante manchada por canas. Buscando darle algo de credibilidad, el can estaba bastante manchado de tierra y fango, y bastante delgado.
Volvió hacia el lugar del incidente, y buscó por allí a Koke o a Rao. Fuese cual fuese al primero que viese, buscaría un momento que el que estuviese solo. Entre tanto, Etsu se agazaparía por cualquier rincón, interpretando a un perro callejero. Con las mismas también tenía un punto a favor, podría ver desde primera línea si ahora que el atardecer caía venían de regreso los Cuatro restantes.
Volvió hacia el lugar del incidente, y buscó por allí a Koke o a Rao. Fuese cual fuese al primero que viese, buscaría un momento que el que estuviese solo. Entre tanto, Etsu se agazaparía por cualquier rincón, interpretando a un perro callejero. Con las mismas también tenía un punto a favor, podría ver desde primera línea si ahora que el atardecer caía venían de regreso los Cuatro restantes.
~ No muerdas lo que no piensas comerte ~