4/05/2020, 15:11
En otras circunstancias, aquello le habría puesto en alerta máxima. Pero, a decir verdad, Rōga había perdido todas las ganas de pelear en un instante. No, no se sentía insultado sino traicionado. En otras circunstancias quizá hubiese intentado reaccionar al escuchar el estallido de humo tras de sí a sabiendas de que Ayame le explicó que tenía aquella técnica de teletransporte.
Pero para ello, debería usar algo muy peligroso, y eso son cosas que no se usan con un compañero.
Daruu ya encontraría a un lobo agachado en el suelo. Tras el primer golpe, el aura eléctrica desapareció en varias chispas plateadas que se dispersaron por el aire. Pero el cachorro no gruñó ni soltó quejido alguno de dolor.
Él no tenía una gran fuerza como Ranko, no podía tirar una técnica fuerte sin cansarse casi siempre al primer intento, no tenía un cuerpo que soportase los golpes como Eri, era tan lento que aún con una técnica como la Yoroi apenas podía igualar a otros, no tenía una coordinación en las manos como Daruu, no tenía un chakra tan destructivo como Datsue, no era un gran estratega versátil como Ayame, no tenía la aguda capacidad de observación de Akame e incluso, realmente ni siquiera era tan convincente o inspirador como Daigo.
Rōga solo tenía su orgullo, y aún estando apaleado como lo estaba, se negaba a perderlo, soportando los golpes sin quejarse una sola vez. Fanfarrón hasta el final, finalmente cayó al suelo salpicando algunas gotas de sangre alrededor.
Pero para ello, debería usar algo muy peligroso, y eso son cosas que no se usan con un compañero.
Daruu ya encontraría a un lobo agachado en el suelo. Tras el primer golpe, el aura eléctrica desapareció en varias chispas plateadas que se dispersaron por el aire. Pero el cachorro no gruñó ni soltó quejido alguno de dolor.
Él no tenía una gran fuerza como Ranko, no podía tirar una técnica fuerte sin cansarse casi siempre al primer intento, no tenía un cuerpo que soportase los golpes como Eri, era tan lento que aún con una técnica como la Yoroi apenas podía igualar a otros, no tenía una coordinación en las manos como Daruu, no tenía un chakra tan destructivo como Datsue, no era un gran estratega versátil como Ayame, no tenía la aguda capacidad de observación de Akame e incluso, realmente ni siquiera era tan convincente o inspirador como Daigo.
Rōga solo tenía su orgullo, y aún estando apaleado como lo estaba, se negaba a perderlo, soportando los golpes sin quejarse una sola vez. Fanfarrón hasta el final, finalmente cayó al suelo salpicando algunas gotas de sangre alrededor.