30/12/2015, 17:34
*Amegakure...*
Aquellas cuatro marcas en la bandana de la morena eran totalmente distinguibles, provenía del oeste, de la Aldea Oculta de la Lluvia. La primera persona de aquel peculiar lugar con la que me cruzaba, y Mitsuki claro, que era de Uzushiogakure, pero con ella ya me había cruzado alguna vez por nuestra aldea aunque se empecinase en no reconocerme.
-¿Bromeas?- pregunté sarcásticamente clavando la mirada en la poseedora del byakugan -Uzushiogakure no es tan grande como para que no me recuerdes y esto nos lleva a la pregunta de... emmm, disculpa pero no sé tu nombre, kunoichi de Amegakure..
Di unos golpecitos a mi ropa, sacudiéndome el polvo y las hojas de los arboles con los que había chocado durante mi aterrizaje forzoso y desastroso. Puse mis manos en mis bolsillos y saqué pecho ahora que era en centro de las miradas y toda la atención estaba fijada en mí.
-Permíteme que me presente, por favor. ¡Ante ustedes, queridas damas de estos mundos ninjas, el inigualable, el increíble shinobi araña, Sasagani Yota!-
Alcé las manos en cuanto pronuncie mi nombre y di un par de vueltas sobre mi mismo como si estuviese saludando la gente de las gradas de un gran estadio mientras imaginaba los aplausos de la gente para acabar poniéndome en frente de las dos chicas de nuevo
-¿Ya me recuerdas, Mitsuki?-
Aquellas cuatro marcas en la bandana de la morena eran totalmente distinguibles, provenía del oeste, de la Aldea Oculta de la Lluvia. La primera persona de aquel peculiar lugar con la que me cruzaba, y Mitsuki claro, que era de Uzushiogakure, pero con ella ya me había cruzado alguna vez por nuestra aldea aunque se empecinase en no reconocerme.
-¿Bromeas?- pregunté sarcásticamente clavando la mirada en la poseedora del byakugan -Uzushiogakure no es tan grande como para que no me recuerdes y esto nos lleva a la pregunta de... emmm, disculpa pero no sé tu nombre, kunoichi de Amegakure..
Di unos golpecitos a mi ropa, sacudiéndome el polvo y las hojas de los arboles con los que había chocado durante mi aterrizaje forzoso y desastroso. Puse mis manos en mis bolsillos y saqué pecho ahora que era en centro de las miradas y toda la atención estaba fijada en mí.
-Permíteme que me presente, por favor. ¡Ante ustedes, queridas damas de estos mundos ninjas, el inigualable, el increíble shinobi araña, Sasagani Yota!-
Alcé las manos en cuanto pronuncie mi nombre y di un par de vueltas sobre mi mismo como si estuviese saludando la gente de las gradas de un gran estadio mientras imaginaba los aplausos de la gente para acabar poniéndome en frente de las dos chicas de nuevo
-¿Ya me recuerdas, Mitsuki?-
Narro ~ Hablo ~ Pienso ~ Kumopansa