1/06/2020, 21:39
Le empujó contra la pared.
—¿¡Pero qué haces payas...!? —Se calló en el momento en el que vio su mirada y su sonrisa, parecía que le iba a hacer algo.
—Pensaba dejaros libre albedrío pero... Viendo tu actitud, algo me dice que me vas a traicionar. No pienso quitarte el ojo de encima. Y puedes creerme cuando te digo que si descubro que te has ido de la lengua, te encontraremos. Tú mismo...
Sin esperar respuesta siquiera saltó con gracilidad sobre los edificios y desapareció.
—Puto gilipollas... —Murmuró mientras movía circularmente sus hombros por el golpe contra la pared.
Claro que les quería traicionar, no sabía que cojones se pensaba su "jefe". Hablar ese día con el artesano no era buena idea, si de verdad les quería traicionar no le iba a delatar, pero con las sospechas de Iroshi sería un suicidio. Ahora solo quería hablar rápido con esa tal Sombra Brillante y volver a su Aldea, ahí sabía que estaría seguro.
Miró a su compañero, pero el amejin había comenzado ya a andar.
—Hey, ¿a dónde vas? —Le preguntó. Por la dirección que parecía querer tomar podría estar dirigiéndose a la casa de Takato Fukiwa. —Lo mejor es que nos piremos ya de la ciudad, hablar con ese viejo no es ninguna orden que nos haya dado Iroshi.
No quería discutir con su amigo, pero tampoco quería delatar a ese pobre anciano, había sido muy amable con ellos y si, de ser cierto lo de la traición, le delataran se sentiría muy mal consigo mismo.
—¿¡Pero qué haces payas...!? —Se calló en el momento en el que vio su mirada y su sonrisa, parecía que le iba a hacer algo.
—Pensaba dejaros libre albedrío pero... Viendo tu actitud, algo me dice que me vas a traicionar. No pienso quitarte el ojo de encima. Y puedes creerme cuando te digo que si descubro que te has ido de la lengua, te encontraremos. Tú mismo...
Sin esperar respuesta siquiera saltó con gracilidad sobre los edificios y desapareció.
—Puto gilipollas... —Murmuró mientras movía circularmente sus hombros por el golpe contra la pared.
Claro que les quería traicionar, no sabía que cojones se pensaba su "jefe". Hablar ese día con el artesano no era buena idea, si de verdad les quería traicionar no le iba a delatar, pero con las sospechas de Iroshi sería un suicidio. Ahora solo quería hablar rápido con esa tal Sombra Brillante y volver a su Aldea, ahí sabía que estaría seguro.
Miró a su compañero, pero el amejin había comenzado ya a andar.
—Hey, ¿a dónde vas? —Le preguntó. Por la dirección que parecía querer tomar podría estar dirigiéndose a la casa de Takato Fukiwa. —Lo mejor es que nos piremos ya de la ciudad, hablar con ese viejo no es ninguna orden que nos haya dado Iroshi.
No quería discutir con su amigo, pero tampoco quería delatar a ese pobre anciano, había sido muy amable con ellos y si, de ser cierto lo de la traición, le delataran se sentiría muy mal consigo mismo.