23/08/2020, 19:27
Pues sí, la verdad es que había dedicado mucho de mi tiempo de entrenamiento a esa técnica, desde que terminó el combate contra el espadachín de Kusagakure. Y el entrenamiento había dado sus frutos, aunque quizás me había pasado un poco al apuntar con tanta potencia al vientre. Aún así, al final, había salido todo bien, sin contar los sucesos.
—Pues sí, le dejé una bonita abolladura con forma de espiral. Se ve que los herreros de allí son de mala calidad...
Oye. Mejor para mí, seria mucho más famoso. Algún día, la Morikage tendría que aceptar que yo era el mejor herrero de Oonindo, e incluso ella querría encargarme a mí las bandanas. Aunque primero, tendría que entrar en razón con otras muchas cosas...
—Pues sí, aunque con lo acontecido, dudo que nada le sorprenda. Seguro que se lo toma con calma.
Dije despidiendome de Datsue devolviéndole el gesto que había hecho con la mano. Ahora tocaba esperar al día siguiente meditando que hacer con la espada y como contarle todo a Hanabi.
—Pues sí, le dejé una bonita abolladura con forma de espiral. Se ve que los herreros de allí son de mala calidad...
Oye. Mejor para mí, seria mucho más famoso. Algún día, la Morikage tendría que aceptar que yo era el mejor herrero de Oonindo, e incluso ella querría encargarme a mí las bandanas. Aunque primero, tendría que entrar en razón con otras muchas cosas...
—Pues sí, aunque con lo acontecido, dudo que nada le sorprenda. Seguro que se lo toma con calma.
Dije despidiendome de Datsue devolviéndole el gesto que había hecho con la mano. Ahora tocaba esperar al día siguiente meditando que hacer con la espada y como contarle todo a Hanabi.