25/03/2021, 21:46
—¿De nacimiento dices? Marca de nacimiento sería algún lunar, o alguna mancha rara... ¿pero toda la cara en plan antifaz? Es que lo veo y no me lo creo. Hasta te creería más si fuera un tatuaje o algo, pero bueno, eso no es el tema que nos concierne aquí — Se cruzó de brazos.
Pese a que ella dijo estar feliz de colaborar, sus modales denotaban lo contrario. Al capataz no le pasó desapercibida la actitud rebeldona de la muchacha. ¿Pero que podía hacer él contra la juventud? Al menos intentar guiarla, pero no pudo evitar levantar la voz ante el tono insolente de la muchacha.
—Si... y no.... movió su cabeza de cada a lado. —Si, vamos a terminar pronto, pero eso no significa que no tengamos problemas. De hecho, tenemos más de uno. Entre tres de mis muchachos heridos la noche pasada, el atraso más grave fue cuando alguien hace un par de semanas saboteó una sección que ya habíamos terminado. Estos rufianes no se limitan solo a intentar atacarnos, sino que en el momento que nos descuidamos vandalizan lo que ya hemos hecho y nos retrasan. Si no fuera por ellos en realidad ya habríamos terminado el trabajo. Sólo necesitamos unos días más, sin que nadie nos moleste, y aquí es dónde entras tú.
Señaló a la muchacha en el pecho con su dedo índice.
»Necesitamos que encuentres a los bandidos. Ya me da igual como los escarmientes, solo quiero que dejen de acercarse y nos dejen terminar de una buena vez. La guarida parece estar del otro lado en el País de la Tierra, pero más allá de eso nadie ha tenido el tiempo ni los huevos de acercarse por temor a represalias. No es uno, son varios, y armados, aunque sólo atacan pasada de la media noche y en la madrugada. Por lo menos, tienes cara de matona, así que confío en que les puedes dar una paliza en nombre de mis muchachos lastimados.
Pese a que ella dijo estar feliz de colaborar, sus modales denotaban lo contrario. Al capataz no le pasó desapercibida la actitud rebeldona de la muchacha. ¿Pero que podía hacer él contra la juventud? Al menos intentar guiarla, pero no pudo evitar levantar la voz ante el tono insolente de la muchacha.
—Si... y no.... movió su cabeza de cada a lado. —Si, vamos a terminar pronto, pero eso no significa que no tengamos problemas. De hecho, tenemos más de uno. Entre tres de mis muchachos heridos la noche pasada, el atraso más grave fue cuando alguien hace un par de semanas saboteó una sección que ya habíamos terminado. Estos rufianes no se limitan solo a intentar atacarnos, sino que en el momento que nos descuidamos vandalizan lo que ya hemos hecho y nos retrasan. Si no fuera por ellos en realidad ya habríamos terminado el trabajo. Sólo necesitamos unos días más, sin que nadie nos moleste, y aquí es dónde entras tú.
Señaló a la muchacha en el pecho con su dedo índice.
»Necesitamos que encuentres a los bandidos. Ya me da igual como los escarmientes, solo quiero que dejen de acercarse y nos dejen terminar de una buena vez. La guarida parece estar del otro lado en el País de la Tierra, pero más allá de eso nadie ha tenido el tiempo ni los huevos de acercarse por temor a represalias. No es uno, son varios, y armados, aunque sólo atacan pasada de la media noche y en la madrugada. Por lo menos, tienes cara de matona, así que confío en que les puedes dar una paliza en nombre de mis muchachos lastimados.