26/03/2021, 13:04
Pese a que Mai no estaba muy conforme con Eri, al final logró entrar en razón al ver a Daruu en semejante situación. Eri corrió a socorrerla, haciendo todo lo que la guardia le ordenaba. No parecía contenta con el tratamiento que Yota había usado, pero a Eri eso no le parecía mal. Para ella lo importante era que Daruu sobreviviera.
—¿Ha pasado algo más en mi ausencia? —preguntó a Yota, sin dejar de mirar el estado en el que se encontraba Daruu mientras Mai indicaba que no pintaba bien su situación.
Pero, al parecer, tenía un as bajo la manga.
—Mucho me temo... que tendré que aplicar mi tratamiento especial....
—¿Necesitas algo en especial? Mándame lo que quieras, yo te lo traeré enseguida. —Se ofreció la kunoichi del Remolino.
—¿Ha pasado algo más en mi ausencia? —preguntó a Yota, sin dejar de mirar el estado en el que se encontraba Daruu mientras Mai indicaba que no pintaba bien su situación.
Pero, al parecer, tenía un as bajo la manga.
—Mucho me temo... que tendré que aplicar mi tratamiento especial....
—¿Necesitas algo en especial? Mándame lo que quieras, yo te lo traeré enseguida. —Se ofreció la kunoichi del Remolino.