2/06/2021, 13:48
Pero estaba claro que no iban tiempo para relajarse. El brutal golpe que había asestado Zetsuo desencadenó un violento temblor que sacudió el pasillo con tanta fuerza como si el mismo Kurama lo hubiese golpeado con una de sus colas. De hecho, el médico se tuvo que hacer a un lado antes de que un fragmento del techo le cayese encima. No tendrían más de tres segundos antes de sufrir el mismo destino que Kuroyuki.
—¡Tenemos que salir de aquí YA! —bramó, antes de echar a correr hacia el final del pasillo.
Y el techo se resquebrajó sobre ellos con un sonoro crujido, subrayando la amenaza que, literalmente, se cernía sobre sus cabezas. Dos segundos.
—¡Aprisa! —exclamó Yui, antes de desvanecerse con un movimiento instantáneo que Kōri acompañó de forma inmediata.
Ayame tampoco necesitó que nadie le dijera lo que debía hacer. Para cuando su padre había dado el aviso, ella ya había echado a correr con todas sus fuerzas. Un segundo...
Ni siquiera tuvieron que ponerse de acuerdo hacia qué lado girar al final del pasillo. De haber tenido más tiempo, Ayame podría haber utilizado su ecolocalización para comprobar de antemano qué camino era mejor, pero el tiempo era algo que les faltaba y tenían que decidir. Lo hicieron casi de forma simultánea, como un banco de peces que sólo busca protegerse del temible depredador: Derecha.
—¡Tenemos que salir de aquí YA! —bramó, antes de echar a correr hacia el final del pasillo.
Y el techo se resquebrajó sobre ellos con un sonoro crujido, subrayando la amenaza que, literalmente, se cernía sobre sus cabezas. Dos segundos.
—¡Aprisa! —exclamó Yui, antes de desvanecerse con un movimiento instantáneo que Kōri acompañó de forma inmediata.
Ayame tampoco necesitó que nadie le dijera lo que debía hacer. Para cuando su padre había dado el aviso, ella ya había echado a correr con todas sus fuerzas. Un segundo...
Ni siquiera tuvieron que ponerse de acuerdo hacia qué lado girar al final del pasillo. De haber tenido más tiempo, Ayame podría haber utilizado su ecolocalización para comprobar de antemano qué camino era mejor, pero el tiempo era algo que les faltaba y tenían que decidir. Lo hicieron casi de forma simultánea, como un banco de peces que sólo busca protegerse del temible depredador: Derecha.