7/06/2021, 21:58
Lentamente fue alejando y guardando la fotografía al ver la reacción de la chica, no parecía que haya visto al hombre bajo ningún concepto. Lo bueno, por lo menos, es que si parecía que podía haber alguien en el restaurante que sepa algo sobre el vagabundo.
—Si, entiendo. No quiero que se malentienda nada, así que iré por detrás sin problemas. Muchas gracias por la ayuda, suerte con todo. — le dedicó otra sonrisa, también en un intento de seguir mostrándose cordial, y se dio media vuelta.
La empleada, ni bien pudo, se giró sobre sus patines y fue directo a atender nuevos clientes. Todavía le seguía sorprendiendo la forma en la que se movían todos ahí, se le hacía hasta hipnotizante en un momento. Pero no podía perder mucho tiempo allí, tenía que conseguir rápido la información y zanjar con el asunto lo antes posible. Así que ni bien pudo, salió por la puerta principal del negocio sin más, teniendo cuidado por si había gente que tenía que entrar.
Tal como indico la mesera, se fue derecho a la parte trasera del restaurante, buscando la dichosa puerta. Si la encontraría, ¿qué debía hacer? ¿abrirla o tocar? Ella supuso que si la empleada le dijo que entrase por allí, no habría ningún problema que entrase sin más. Según la chica, los cocineros iban a estar ocupado en ese momento, por lo que ella quería entrar lo más rápido posible y soltar su duda, sin sacarle mucho de su preciado tiempo a los trabajadores del lugar.
—Si, entiendo. No quiero que se malentienda nada, así que iré por detrás sin problemas. Muchas gracias por la ayuda, suerte con todo. — le dedicó otra sonrisa, también en un intento de seguir mostrándose cordial, y se dio media vuelta.
La empleada, ni bien pudo, se giró sobre sus patines y fue directo a atender nuevos clientes. Todavía le seguía sorprendiendo la forma en la que se movían todos ahí, se le hacía hasta hipnotizante en un momento. Pero no podía perder mucho tiempo allí, tenía que conseguir rápido la información y zanjar con el asunto lo antes posible. Así que ni bien pudo, salió por la puerta principal del negocio sin más, teniendo cuidado por si había gente que tenía que entrar.
Tal como indico la mesera, se fue derecho a la parte trasera del restaurante, buscando la dichosa puerta. Si la encontraría, ¿qué debía hacer? ¿abrirla o tocar? Ella supuso que si la empleada le dijo que entrase por allí, no habría ningún problema que entrase sin más. Según la chica, los cocineros iban a estar ocupado en ese momento, por lo que ella quería entrar lo más rápido posible y soltar su duda, sin sacarle mucho de su preciado tiempo a los trabajadores del lugar.