20/07/2021, 21:18
—¡Hitoshin!— Haciendo uso de seguramente su técnica más emblemática aunque Lyndis no lo supiera; Ranko destrozó parte del suelo a su alrededor, para después sobrepasarla con una gran velocidad dirigiendolé una desafiante sonrisa.
Lyndis dió un par de pasos errados, debido al impulso por el lateral que la desestabilizó en la carrera. Tras ver aquello, se quedo un poco atolondrada ante la sonrisa de la chica y al ver su cuerpo adelantarla con tanta facilidad aun debido al peso que llevaba, reduciendo su caminata con lentitud hasta quedarse quieta por un momento. Lyndis valoraba por encima de todo el esfuerzo del propio cuerpo físico, al de usar el propio chakra como alimento en este para potenciarlo y llevarlo más allá, y aquello era lo que buscaba probar con aquella carrera.
Pero Ranko torció su idea, pero no la frustró, si no que la animó a intentar hacerlo ella también. De hecho, aquella técnica, no era desconocida para la genin de pelos plateados. Dio un nuevo paso, presionando con fuerza las piernas, para replicar acto seguido lo que su amiga había hecho momentos antes.
— ¡Hitoshin! — El suelo alrededor de sus pies se resquebrajó, y salió con gran velocidad intentando interceptar la velocidad de Ranko, aunque esta ya le sacaba bastantes metros de diferencia.
Lyndis dió un par de pasos errados, debido al impulso por el lateral que la desestabilizó en la carrera. Tras ver aquello, se quedo un poco atolondrada ante la sonrisa de la chica y al ver su cuerpo adelantarla con tanta facilidad aun debido al peso que llevaba, reduciendo su caminata con lentitud hasta quedarse quieta por un momento. Lyndis valoraba por encima de todo el esfuerzo del propio cuerpo físico, al de usar el propio chakra como alimento en este para potenciarlo y llevarlo más allá, y aquello era lo que buscaba probar con aquella carrera.
Pero Ranko torció su idea, pero no la frustró, si no que la animó a intentar hacerlo ella también. De hecho, aquella técnica, no era desconocida para la genin de pelos plateados. Dio un nuevo paso, presionando con fuerza las piernas, para replicar acto seguido lo que su amiga había hecho momentos antes.
— ¡Hitoshin! — El suelo alrededor de sus pies se resquebrajó, y salió con gran velocidad intentando interceptar la velocidad de Ranko, aunque esta ya le sacaba bastantes metros de diferencia.