22/08/2021, 21:32
La chica con la que le había tocado trabajar hoy no parecía estar animada, o preparada para trabajar, o realmente nada. Más bien parecía que acababa de despertar y que estaba muy preparada para volverse a dormir.
Jun tardó un segundo en responderle, presentándose como Nara Jun. Era una chica pálida ligeramente más alta que ella, de ojos color marrón claro y un piercing en el labio, además de llevar su cabello negro rapado por la parte derecha.
— ¿Tenemos que resolver el misterio de una casa de los misterios? —Le preguntó a Jun, que ahora estaba bostezando. Aunque era una pregunta retórica—. Una vez fui a una, aunque no es algo que se me de muy bien.
Kimi enrolló el pergamino y lo guardó en su portaobjetos, antes de estirar la mano metálica para que Jun le devolviese el paraguas.
— ¿A ti se te dan bien los misterios, Jun?
Jun tardó un segundo en responderle, presentándose como Nara Jun. Era una chica pálida ligeramente más alta que ella, de ojos color marrón claro y un piercing en el labio, además de llevar su cabello negro rapado por la parte derecha.
— ¿Tenemos que resolver el misterio de una casa de los misterios? —Le preguntó a Jun, que ahora estaba bostezando. Aunque era una pregunta retórica—. Una vez fui a una, aunque no es algo que se me de muy bien.
Kimi enrolló el pergamino y lo guardó en su portaobjetos, antes de estirar la mano metálica para que Jun le devolviese el paraguas.
— ¿A ti se te dan bien los misterios, Jun?