30/08/2021, 13:26
Cuando aquel bastardo se burló de ella, Lyndis respondió mostrando sus afilados dientes así como dirigiendolé una mirada muy aguda en sus ojos, con el ceño fruncido. Tanto su iris como pupila parecía haber disminuido en cantidad e hizo enfasis mostrandole un puño cerrado, que temblaba con ganas de soltar un buen golpe.
— ¿Qué pasa? ¿Quieres más? — dijo amenazantemente, para después ser tranquilizada un poco por el jefe de obra. — Sea como sea, en cuanto llegue de vuelta a la villa, escribiré un informe sobre esto. No puede pasar por alto el hecho de aquel explosivo — caminó con él hasta la enfermería, cojeando levemetne mientras tenía una mano sobre el costado. — Tenían que haber mandado a alguien más, pero entiendo que no esperabais que fueran tantos. Joder — protestó maldiciendo su mala suerte, y dirigiendo un último vistazo al capataz antes de cruzar la puerta.
— ¿Qué pasa? ¿Quieres más? — dijo amenazantemente, para después ser tranquilizada un poco por el jefe de obra. — Sea como sea, en cuanto llegue de vuelta a la villa, escribiré un informe sobre esto. No puede pasar por alto el hecho de aquel explosivo — caminó con él hasta la enfermería, cojeando levemetne mientras tenía una mano sobre el costado. — Tenían que haber mandado a alguien más, pero entiendo que no esperabais que fueran tantos. Joder — protestó maldiciendo su mala suerte, y dirigiendo un último vistazo al capataz antes de cruzar la puerta.