4/09/2021, 01:24
— Así que has sido tú quien le ha pedido que me mate ¿Quién coño eres tú? ¿Cómo sabes mi nombre?
No se movió, ni siquiera parpadeó, cuando Lyndis se puso en guardia. Seguía ahí parado pasando la mirada de vez en cuando a Sasu, que seguía tirada por ahí en vez de haciendole caso.
— Nunca me han gustado los villanos que le sueltan todo su plan malvado a la heroina antes de dejarla en una situación mortal. Porque eso es lo que somos ¿no? Yo soy el terrible malvado y tú la impoluta heroína. En fin, que no va a haber intercambio animado de información, a menos, claro, que quieras contarme algo.
El miedo que la chica sentía hacia el recien llegado parecía poco a poco ir superando el daño que Lyndis le había hecho. El hombre no dejaba de mirarla sutilmente para que se levantase y cumpliese su mandato y Sasu estaba lentamente levantándose sin apartar la mirada de la kunoichi por miedo a que la volviese a golpear.
No se movió, ni siquiera parpadeó, cuando Lyndis se puso en guardia. Seguía ahí parado pasando la mirada de vez en cuando a Sasu, que seguía tirada por ahí en vez de haciendole caso.
— Nunca me han gustado los villanos que le sueltan todo su plan malvado a la heroina antes de dejarla en una situación mortal. Porque eso es lo que somos ¿no? Yo soy el terrible malvado y tú la impoluta heroína. En fin, que no va a haber intercambio animado de información, a menos, claro, que quieras contarme algo.
El miedo que la chica sentía hacia el recien llegado parecía poco a poco ir superando el daño que Lyndis le había hecho. El hombre no dejaba de mirarla sutilmente para que se levantase y cumpliese su mandato y Sasu estaba lentamente levantándose sin apartar la mirada de la kunoichi por miedo a que la volviese a golpear.