7/09/2021, 03:21
Galante estaba, indiferente. No parecían complacerle las caricias, pero tampoco se mostraba disgustado con el tiburón. Kaido tal vez había tratado con animales, pero ese corcel negro tenía algo especial, como si pudiera entender un poco más de lo que sucedía a su alrededor.
—Tal vez deba decir, que Galante te quiere poner a prueba — Se acercó con los brazos cruzados. —No preguntes como. Pero yo debería decir que tal vez Bandō no hubiese llegado a ser el caballero de las arenas sin la ayuda de su fiel caballo — Desvió su mirada al animal.
El equino sacudió varias veces la cabeza formando un arco que apuntaba a su propio lomo. ¿Estaría invitando al escualo a subirse? Quizá quería terminar las cosas de una vez por todas.
—Tal vez deba decir, que Galante te quiere poner a prueba — Se acercó con los brazos cruzados. —No preguntes como. Pero yo debería decir que tal vez Bandō no hubiese llegado a ser el caballero de las arenas sin la ayuda de su fiel caballo — Desvió su mirada al animal.
El equino sacudió varias veces la cabeza formando un arco que apuntaba a su propio lomo. ¿Estaría invitando al escualo a subirse? Quizá quería terminar las cosas de una vez por todas.
