8/09/2021, 10:34
Aquel sueño fue tan reparador que pareció casi mágico, gracias al cansancio de haber estado todo prácticamente todo el día caminando, durmió sin interrupción alguna a pierna suelta hasta la mañana del día siguiente. Ranko la intentaría despertar con suavidad, acariciándole un hombro y susurrando. Aunque solo obtendría en respuesta unos quejidos incomprensibles. Si seguía por un rato más, o aumentaba la intensidad por fin conseguiría despertarla.
Apoyada sobre sus brazos ligeramente encorvada, daria un largo bostezo mientras todavía se agarraba a su almohada.
— Tan solo cinco minutos más — y se desplomaría sobre esta.
Seguramente Ranko la forzaría a levantarse y esta se quejaría por otro lado agarrándose a la almohada, protestando con quejidos agudos ahogados en la tela del cojín aunque no enfadada. Durante gran parte de la mañana, el sueño sería más que visible en su rostro. No es que hubiera dormido mal, había dormido demasiado bien y quería seguir prolongando ese sueño.
Apoyada sobre sus brazos ligeramente encorvada, daria un largo bostezo mientras todavía se agarraba a su almohada.
— Tan solo cinco minutos más — y se desplomaría sobre esta.
Seguramente Ranko la forzaría a levantarse y esta se quejaría por otro lado agarrándose a la almohada, protestando con quejidos agudos ahogados en la tela del cojín aunque no enfadada. Durante gran parte de la mañana, el sueño sería más que visible en su rostro. No es que hubiera dormido mal, había dormido demasiado bien y quería seguir prolongando ese sueño.