5/10/2021, 01:51
Kimi sonrió con confianza al ver la reacción del mago, pero su sonrisa fue borrada en un instante cuando este reveló que realmente se habían equivocado.
— ¿Eh?
«¿¡Acaba de teletransportar la piedra!?»
Con los ojos como platos, la chica apoyó ambas manos sobre la mesa y se inclinó, observando incrédula como la piedrecita estaba en el cubilete central.
Miro al mago, luego a la piedra y luego al mago de vuelta.
— ¡Intentémoslo de nuevo!
— ¿Eh?
«¿¡Acaba de teletransportar la piedra!?»
Con los ojos como platos, la chica apoyó ambas manos sobre la mesa y se inclinó, observando incrédula como la piedrecita estaba en el cubilete central.
Miro al mago, luego a la piedra y luego al mago de vuelta.
— ¡Intentémoslo de nuevo!