20/10/2021, 19:06
Akame asintió.
—Así es. Ese... monstruo —escupió aquella palabra—. Y sí, desde luego el ejemplo de Kurama es bastante ilustrativo, aunque comparado con el Ichibi, no son tan diferentes. Ambos nos consideran a todos poco menos que ignorantes atrevidos que osamos ponerles cadenas a su infinitamente superior presencia.
El exiliado se recostó de nuevo sobre la loma de arena, fumando con extraña tranquilidad.
—Si lo piensas, tiene hasta sentido, ¿eh? —inquirió con cierta amargura—. Esos condenados demonios son más poderosos que nosotros, más inteligentes que nosotros, viven más que nosotros... —dejó escapar un bufido—. No me extraña que ese zorro tenga seguidores.
Fumó otra calada.
—Joder, qué mierda, ¡já! Todo Ōnindo está preocupado de lo que gente como nosotros hace o deja de hacer, pero por las tetas de Amaterasu que el verdadero Fin del Mundo vendrá de la mano del monstruo de Nueve Colas... Y ese no distingue ninjas de civiles, Remolino de Lluvia o Hierba —soltó una risilla—. Mierda, ¿de verdad es así como nos vamos a ir todos al infierno? ¿Desintegrados por una bijūdama del zorro?
—Así es. Ese... monstruo —escupió aquella palabra—. Y sí, desde luego el ejemplo de Kurama es bastante ilustrativo, aunque comparado con el Ichibi, no son tan diferentes. Ambos nos consideran a todos poco menos que ignorantes atrevidos que osamos ponerles cadenas a su infinitamente superior presencia.
El exiliado se recostó de nuevo sobre la loma de arena, fumando con extraña tranquilidad.
—Si lo piensas, tiene hasta sentido, ¿eh? —inquirió con cierta amargura—. Esos condenados demonios son más poderosos que nosotros, más inteligentes que nosotros, viven más que nosotros... —dejó escapar un bufido—. No me extraña que ese zorro tenga seguidores.
Fumó otra calada.
—Joder, qué mierda, ¡já! Todo Ōnindo está preocupado de lo que gente como nosotros hace o deja de hacer, pero por las tetas de Amaterasu que el verdadero Fin del Mundo vendrá de la mano del monstruo de Nueve Colas... Y ese no distingue ninjas de civiles, Remolino de Lluvia o Hierba —soltó una risilla—. Mierda, ¿de verdad es así como nos vamos a ir todos al infierno? ¿Desintegrados por una bijūdama del zorro?