23/10/2021, 16:44
Pese a la siniestra mirada que le dedicó su sensei —llevaba haciéndolo desde que sugirió proponerse como Arashikage—, Daruu esbozó una media sonrisa y comenzó a descender poco a poco por las escaleras con las manos en los bolsillos de la chaqueta.
—Lo dices como si acostumbrara a dejarte tirado, sensei —bromeó, cuando su pie rozaba el último escalón. Luego, su semblante se ensombreció y, mirándole a los ojos, comentó (porque fue más un comentario que una pregunta): Ayame sigue mal, ¿verdad? —Desde que despertó, Daruu tan solo había conseguido arrancarle un par de palabras... a Kokuō. Pero no había tenido oportunidad de hablar con Ayame—. Kōri-sensei... quiero que sepas que pase lo que pase en el combate, pienso proponerme igual. Lo sabes, ¿verdad?
—Lo dices como si acostumbrara a dejarte tirado, sensei —bromeó, cuando su pie rozaba el último escalón. Luego, su semblante se ensombreció y, mirándole a los ojos, comentó (porque fue más un comentario que una pregunta): Ayame sigue mal, ¿verdad? —Desde que despertó, Daruu tan solo había conseguido arrancarle un par de palabras... a Kokuō. Pero no había tenido oportunidad de hablar con Ayame—. Kōri-sensei... quiero que sepas que pase lo que pase en el combate, pienso proponerme igual. Lo sabes, ¿verdad?