5/12/2021, 02:07
¡BOOOOOOOOM!
Fue de golpe, como suceden las explosiones. No hubo ninguna luz que les avisó ni ningún tipo de cuenta atrás. La chica simplemente llegó a abrir el pergamino, cerrar los ojos y salir volando.
Su cuerpo se detuvo en cuanto se estrelló contra la pared, pero su mente siguió volando atrás. Tiempo atrás. Su vida ninja también había empezado con una explosión.
Instintivamente, incluso antes de recuperarse del aturdimiento, se llevó la mano a su brazo metálico. Le dolía mucho, incluso más que el resto del cuerpo.
Las voces de quienes habían venido a socorrerla empezaron a llegar a ella poco a poco. Escuchó algo del hermano de Nazo y otra voz preguntándole si estaba bien.
— S-sí... —No—. Jun-san... ¡Mi compañera!
Se esforzó en levantarse e ir hacia ella. Fue entonces cuando notó las paredes agrietadas.
— ¿Estás bien? ¿Puedes levantarte? —Su ojo brillaba en rojo y ahora parecía dar algo de estática al contacto. Realmente se estaba esforzando—. Todos. Debemos salir de aquí ya. No sé si el edificio podrá aguantar mucho más.