15/12/2021, 10:55
Casi que ni miró al de Uzu cuando soltó semejantes palabras, no quería hacerlo. Pero se daba una idea de que se la debía estar pasando bien, supuso que era bastante inesperado y aleatorio. La reacción del flaco le pareció extraña. Ella pensó que se iba a alterar un poco y ponerse un poco más serio, cosa totalmente contraria a lo que pasó. Una notoria sudoración hizo acto de presencia y un estado de inquietud invadió su cuerpo, en un intento por buscar y señalar una de esas molestas reglas que tanto nombraba.
Decidió parar por un segundo de hacerse cargo de la conversación, parando el ping pong que estaba teniendo con el hombre. Esta vez hablaron los otros dos espectadores, Hayato y el hombe más robusto. Este último no solo le hizo recordar a su compañero un dato importante, también se lo compartió a los dos chiquillos. Como buena persona de negocios, Siete intentó resolver la situación con la parla y cumplir con su cometido, el cual era que estos dos dejen de molestarlos. Pero Jun, como buena persona ociosa, quería seguir exprimiendo más de esa torpe situación.
—Como mi compañero, yo tampoco conocía mucho de esas reglas. Deberían dejar claro en algún lugar de la ciudad las reglas más importantes de aquí, para que no pasen este tipo de cosas. — Lejos de sonar amenazante, desbordaba de expresiones amistosas. Parecía casi como lo que en verdad era, una niña. —Veo que aún no son guardas, ¿es muy difícil convertirse en uno?
Decidió parar por un segundo de hacerse cargo de la conversación, parando el ping pong que estaba teniendo con el hombre. Esta vez hablaron los otros dos espectadores, Hayato y el hombe más robusto. Este último no solo le hizo recordar a su compañero un dato importante, también se lo compartió a los dos chiquillos. Como buena persona de negocios, Siete intentó resolver la situación con la parla y cumplir con su cometido, el cual era que estos dos dejen de molestarlos. Pero Jun, como buena persona ociosa, quería seguir exprimiendo más de esa torpe situación.
—Como mi compañero, yo tampoco conocía mucho de esas reglas. Deberían dejar claro en algún lugar de la ciudad las reglas más importantes de aquí, para que no pasen este tipo de cosas. — Lejos de sonar amenazante, desbordaba de expresiones amistosas. Parecía casi como lo que en verdad era, una niña. —Veo que aún no son guardas, ¿es muy difícil convertirse en uno?