21/01/2022, 04:40
Era algo gracioso que, ninguno de los dos, sabía exactamente que estaban buscando. Le podían meter todas las ganas que quieran, pero si no tenían certeza de cuales eran los objetos que tenían que buscar, no iban a avanzar mucho allí. Y es que tampoco podían deducir que es lo que buscaban a simple vista entre tanta mierda que había en... bueno, en todos lados ¿Podía, quizás, hilar con algo que tuvo en su misión anterior? Por lo menos hasta ese momento, no se le ocurría nada y tampoco tenía pinta que haya relación alguna con la anterior comisión.
En un momento, se había puesto de cuclillas, a punto de empezar a usar las manos para revolver los objetos del suelo, en un intento por encontrar algo. Sinceramente, le daba un poco de asco lo que iba a hacer. En la indecisión, tanto la voz de su compañero como aquel sonido extraño, la interrumpieron en su cometido.
—P-pero, ¿qué mierda?
Si bien todo allí estaba en ruinas, no le había prestado atención al detalle que mencionó el pintor. Tampoco sabía mucho de construcciones, pero si se le hacía raro que el suelo haga ese ruido de la nada. Ese lugar tenía más peligro de derrumbe de lo que, ya de por sí, aparentaba.
Se levantó con cierta parsimonia y delicadeza, intentando omitir movimientos bruscos. Volteó su cabeza para ver a Nao.
—¿Sería una locura que haya un piso abajo? Digo, como un subsuelo o algo por el estilo. — Preguntó realmente inocente, sin saber muy bien si lo que decía tenía mucho sentido o si era una total estupidez.
En un momento, se había puesto de cuclillas, a punto de empezar a usar las manos para revolver los objetos del suelo, en un intento por encontrar algo. Sinceramente, le daba un poco de asco lo que iba a hacer. En la indecisión, tanto la voz de su compañero como aquel sonido extraño, la interrumpieron en su cometido.
—P-pero, ¿qué mierda?
Si bien todo allí estaba en ruinas, no le había prestado atención al detalle que mencionó el pintor. Tampoco sabía mucho de construcciones, pero si se le hacía raro que el suelo haga ese ruido de la nada. Ese lugar tenía más peligro de derrumbe de lo que, ya de por sí, aparentaba.
Se levantó con cierta parsimonia y delicadeza, intentando omitir movimientos bruscos. Volteó su cabeza para ver a Nao.
—¿Sería una locura que haya un piso abajo? Digo, como un subsuelo o algo por el estilo. — Preguntó realmente inocente, sin saber muy bien si lo que decía tenía mucho sentido o si era una total estupidez.